- Suyos fueron los guantes de un histórico doblete obtenido por el Atlético de Madrid de Radomir Antic. Entonces, Molina era cromo del equipo "colchonero" y también quedó como portero menos goleado de La Liga.
En Primera ya había jugado para el Valencia y pasado brevemente por el Villarreal. Otros equipos a los que representó este portero fueron el Albacete, Alzira, Levante y Deportivo de La Coruña, con el que también tuvo sus éxitos.
Su debut como internacional por España no fue precisamente como guardameta. Por circunstancias, Molina contaría como jugador de campo para Javier Clemente, supliendo al lesionado Juanma López para completar un encuentro frente a Noruega como extremo izquierdo.
José Francisco Molina Jiménez tuvo mucho tiempo para figurar en las colecciones, ya que extendió su carrera hasta los 36 años, llegando todavía a tener muchas apariciones, para acumular en Primera un total de 415 partidos.
Este buen cancerbero nació el 8 de agosto de 1970 en Valencia (España). Equipos como el Atlético Benimar, U.D. Alzira y Valencia C.F. marcaron sus comienzos futbolísticos.
Con el Alzira y Mestalla empezó a competir en Segunda B, hasta que en algún momento llegó a ser convocado por Guus Hiddink. No obstante, Molina nunca llegaría a debutar oficialmente para el equipo ché.
Durante la campaña 93\94 jugaría cedido para el Villarreal en Segunda, aunque su momento cumbre llegó con su fichaje por el Albacete Balompié. Con el equipo manchego tuvo extraordinarias actuaciones a mediados de los noventa, que llamaron la atención de los directivos del Atlético.
Molina se ganaría rápidamente el puesto en el equipo madrileño. En su segundo año compitiendo por Primera División, el arquero valenciano conocería la gloria a las órdenes de Antic, llegando a ganar Liga y Copa, además de quedar como Trofeo Zamora al ser el portero menos goleado en el ejercicio 95\96.
Se mantuvo siempre titular en el Atleti, incluso cuando las cosas fueron mal. De forma sorprendente, el club de Manzanares se vería descendiendo a Segunda División en la campaña del cambio de milenio.
- Pero a Molina aún le quedaban grandes momentos por disfrutar, y estos llegarían con su fichaje por un Deportivo que ya competía como un grande y que venía de ser campeón de Liga con Javier Irureta de entrenador.
El técnico vasco apostaría también por el valenciano, que en La Coruña iba a permanecer seis temporadas. En esos años, el portero conseguiría alzar su segunda Copa del Rey y dos Supercopas nacionales.
Fueron muchos años figurando entre los mejores guardianes de La Liga, en la que aún seguiría compitiendo con el Levante U.D. En su retorno al Mediterráneo, Molina estaría en activo un año más y siendo titular, poniendo fin a su trayectoria deportiva tras la aquella campaña 2006\07.
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