¿Te acuerdas de Teo Rastrojo?

- Jugador que, por circunstancias, pudo llegar a jugar para el Athletic de Bilbao pese a no ser vasco. Como rojiblanco, Rastrojo pudo debutar en Primera División aunque, por desgracia, se perdería lo mejor.

Y es que se vio obligado a jugar para el filial y en el Barakaldo mientras todo San Mamés festejaba el título de Liga de 1983. Aún se perdería más, pues acabaría abandonando la disciplina vizcaína poco después.

Este lateral zurdo tendría la oportunidad de sumar un mayor número de partidos en Primera con el Hércules, club en el que estuvo unos años antes de unirse al Levante, con el que también celebraría un ascenso, pero a Segunda División. Después jugaría para Torrevieja y Español de San Vicente.

- Cuesta mucho acostumbrarse a oír un "entra al césped de San Mamés el lateral madrileño", pero esa era la realidad. Rastrojo nació en la capital española el 5 de abril de 1961, y acabó en Bilbao, cuando sus padres se dirigían al "Botxo" por motivos laborales. Por cierto, éstos eran de Oliva de la Frontera (Badajoz).

De modo que Teodoro Rastrojo Méndez no tenía parentesco vasco alguno, aunque el haberse formado en la cantera del Athletic le daría derecho a jugar para el primer equipo. Era un buen jugador que llegó a formar parte de la selección española Sub-18.

Nunca hubo un cromo de este lateral izquierdo como jugador del Athletic. Sus únicas estampas coleccionables pudimos verlas con el Hércules, además con poses molonas, como podéis comprobar en la imagen de la izquierda.

Pero antes de aterrizar en Alicante, Rastrojo tendría que formarse en Lezama y jugar para el filial "zurigorri", donde estuvo al mando de Javier Clemente antes de ser llamado para debutar en Primera.

Rastrojo sería llamado por el austriaco Helmut Senekowitsch, quien le iba a permitir debutar en la Liga Española el 13 de enero de 1980. Se lo llevó a Sevilla, donde los "Leones" se enfrentaron a un Betis que solo cedería un punto en su estadio (0-0).

No sería la única aparición para el carrilero madrileño, que en aquella campaña 1979\80 aún disputaría otros 7 encuentros ligueros, que también serían los últimos en el primer nivel con el Athletic de Bilbao.

Sí que tendría una aparición en la Copa del Rey en la campaña 82\83, justo en la que los bilbaínos presumirían de ser campeones de Liga. Entonces, "Teo" venía de jugar en el Barakaldo y representaba al filial. Aquel año sería el último de Rastrojo por Bilbao, después de haber conseguido el ascenso a Segunda con los "Katxorros".

- Terminada su etapa de rojiblanco, Rastrojo se marcharía hasta Alicante para fichar por el Hércules, con el que empezaría compitiendo en Segunda, y siendo titular para ayudar en el ascenso a la élite.

Con Carlos Jurado y otros técnicos, el madrileño disfrutaría de otras grandes citas en el primer nivel, jugando durante dos temporadas 44 partidos, ya que el equipo descendería tras el ejercicio 85\86.

Se acabarían los cromos para Teo Rastrojo, que aguantaría un año más en el Rico Pérez, de donde saldría para incorporarse al Levante. Para el equipo azulgrana jugaría tres años, consiguiendo el ascenso a Segunda antes de irse al Torrevieja. Su carrera terminaría en el Español de San Vicente, allá por el año 1993.

¿Te acuerdas de Luis Cembranos?

- Llegó joven a tierras catalanas para jugar en el Figueres e ingresar de inmediato en el F.C. Barcelona, aunque fue más bien para jugar en el filial. Con el primer equipo tuvo escasas apariciones.

Por ello acabó recalando en el R.C.D. Espanyol, con el que ya se convirtió en una cara conocida en los cromos de los años noventa. Aún así, Cembranos no llegaría a ganarse la titularidad en el equipo "perico".

Después vendría su etapa como jugador del Rayo Vallecano, club con el que empezó a jugar desde la Segunda División y consiguió un rápido ascenso. Acabó compitiendo por Europa con el conjunto madrileño, para luego retornar cerca de casa y finalizar su carrera con el Promesas Ponferrada.

- Ha estado trabajando como entrenador en los últimos años, pero no fue tan conocido en esta faceta como pudo serlo en su trayectoria de corto. Luis Cembranos Martínez jugaba como volante, controlando gran parte de la línea de medios.

Recuerdo que, en alguna ocasión, su nombre figuraba como "Lluis", catalanizado por su irrupción en el fútbol profesional cuando se hallaba en la Ciudad Condal. Pero este mediocampista no era catalán, y ni siquiera nació en España.

Hijo de emigrantes españoles, Cembranos vino al mundo en la ciudad de Luzern (Suiza), el 6 de junio de 1972. Su familia acabaría regresando a España y se instalaría en León, donde Luis pasó su adolescencia. 

Con el Puente Castro F.C. jugaría sus primeros partidos antes de irse para Catalunya. Entonces se uniría a la Unió Esportiva Figueres, con la que lograría debutar en la categoría de plata a lo largo del curso 1992\93. Aquel año marcaría 6 goles en tan solo 10 partidos.

Sus registros llamaron la atención de los directivos del Barça, entidad a la que se unió en 1993, aunque inicialmente para representar al filial culé. Aun así, Luis tendría la oportunidad de debutar para el gran Johan Cruyff.

Con aquel "Dream Team" debutaría en la élite, el 10 de septiembre de 1994, en un partido con victoria en el Nou Camp, ante el Santander (2-1). Tendría dos apariciones más con aquel fabuloso equipo en el que compartió vestuario con Pep Guardiola y Hristo Stoichkov, pero nada más.

Cembranos se iría del Barça sin poder celebrar títulos, algo a lo que se habían acostumbrado los culés por entonces. Precisamente en la campaña de su debut como blaugrana, el hispano-suizo ficharía por el Espanyol. 

- Para la entidad de Montjuïc jugaría durante cuatro años, para disputar un mayor número de partidos en la alta competición, empezando bajo las órdenes de José Antonio Camacho, quien no contaría mucho con él.

Tampoco es que Cembranos tuviese muchas opciones con el Espanyol, ya que nunca llegaría a ganarse la titularidad. Antes de iniciarse la temporada 1998\99, el mediocampista de Luzern se marcharía al Rayo.

Con el equipo de Vallecas empezaría por Segunda División, ascendiendo en su primer año para después acabar compitiendo en la Copa de la UEFA. Redondeó en Primera unas cifras de 155 partidos y 22 goles, abandonando el club madrileño en 2004, tras bajar a la división de bronce. Cembranos se retiraría con el Promesas Ponferrada.

¿Te acuerdas de Petr Kouba?

- Guardameta checo que alcanzó su mejor fama a mediados de los noventa, y eso le sirvió para fichar por un "Superdepor" de moda. Entonces, algunos le conocíamos de su participación en la Eurocopa de Inglaterra 96, figurando como uno de los mejores cancerberos de su país, indiscutible con la selección checa.

Llegó a España procedente del Sparta de Praga, para darse a conocer con un Deportivo que daba mucha guerra por primera división. Sin embargo, la participación de Kouba en nuestra liga no fue muy amplia.

Le conocimos por nuestras colecciones de cromos, seis apariciones en la Liga Española y alguna que otra en las demás competiciones. En la Bundesliga representó al Kaiserslautern, y más tarde regresó a su país.

- Seguramente, muchos piensen que Petr Kouba fue un auténtico "bluf" de nuestra competición, pero lo cierto es que apenas tuvo oportunidades con los entrenadores que pasaron por Coruña.

Lo que yo pude observar de este guardameta, es que era un tipo con condiciones físicas muy óptimas para ocupar la portería, con tremenda seguridad y un especialista en el mano a mano y las salidas por alto.

Kouba nació en Praga (República Checa), el 28 de enero de 1969. Entonces, aún existía el extinto país de Checoslovaquia, a cuya selección llegaría a representar Petr cuando jugaba para el Sparta praguense.

Los inicios de Kouba se forjaron en canteras como la del Bohemians de Praga y Slavoj Vyšehrad. Con el Bohemians daría el salto profesional a finales de los ochenta, y en 1991 se uniría al afamado Sparta.

Con los "Železná" alcanzó una gran popularidad, destacando como uno de los mejores porteros de su país y ganando varios títulos en sus cinco años como miembro de la entidad capitalina. Tras su participación en la Euro del 96, el meta checo aterrizaría por España.

Kouba era un desconocido para muchos deportivistas, llegando al club de Riazor para competir por el puesto con Jacques Songo'o, que sin duda, era el jefe del marco de los blanquiazules, muy de moda entonces.

Sus primeras oportunidades llegarían con la competición de Copa, participando en difíciles compromisos ante equipos como el Mallorca y Sevilla. Para ver su estreno liguero, habría que aguardar hasta comienzos del año 1997, en un partido en Zorrilla contra el Valladolid, que se saldó con empate a uno.

- Lo cierto es que fue en su primera campaña como deportivista cuanto más pudimos verle en acción, yéndose cedido a Alemania de cara al curso 97\98, donde jugó para el Kaiserslautern.

No llegó a debutar en la Bundesliga con Otto Rehhagel, quien hizo campeones a los "Diablos Rojos" aquel año. Kouba volvería a La Coruña para saborear otro festejo liguero, aunque solamente tuvo 2 apariciones con Javier Irureta.

Menos opciones tendría al año siguiente, lo que forzaría su salida de la empresa gallega con solo 6 partidos en nuestra competición. El meta checo continuaría su carrera en su país natal, jugando para equipos como el Viktoria Žižkov y Jablonec, para luego colgar los guantes en el Sparta.

¿Te acuerdas de José María Ceballos?

- Sigamos con porteros. Hoy será el turno de un buen futbolista que, a lo largo de toda su carrera, solamente representó al Racing de Santander. Es una de esas grandes figuras a las que se caracterizan con la etiqueta de "The One Club Man". No hubo más que ele equipo de su ciudad.

Vivió tiempos de ascenso en sus primeros pasos como racinguista, así como también se vio compitiendo por la Segunda B. Casi a mediados de los noventa, Ceballos empezó a figurar en las colecciones de cromo.

A partir de entonces, a este arquero le esperaban muchos partidos en Primera División, un total de 284, para ser más exactos. Antes de retirarse, alzó al Racing a otro ascenso para seguir en el máximo nivel.

- El suyo es uno de los adhesivos que mejor recuerdo, pillándome en plena conversión a la adolescencia para descubrir un Racing al que no estaba acostumbrado a ver por la primera categoría. Su cromo siempre lo asocié al de Pinillos, otro guardameta de su época.

Desde hace años, José María Ceballos Vega sigue trabajando para el club de sus amores, trabajando como entrenador de jóvenes promesas para la portería y en un Racing que ansía poder codearse de nuevo con los más grandes.

Le llamaban "El gato de Pámanes", pues en esta localidad cántabra nació el 7 de septiembre de 1968. Empezó jugando para el Club Deportivo Cayón, de donde ya pasaría al Racing de Santander. En sus secciones menores se fue formando.

Aún quedaba mucho por descubrir de un joven y habilidoso portero que pronto se haría con un puesto en la plantilla del primer equipo. De la misma que iba jugando para el Rayo Cantabria, Ceballos ya entraría en las primeras convocatorias de Delfín Álvarez.

Ya era un meta destacado en el filial cuando recibió la llamada de José Ufarte para debutar con los mayores. El 10 de septiembre de 1989, Ceballos sería titular en la visita a Ipurua, donde logró mantener su portería a cero para conseguir una victoria ante el Eibar (0-2).

Con sus formidables acciones bajo palos, el de Pámanes conseguiría ganarse la titularidad, aunque los resultados de aquel curso 89\90 no acompañaron, y el Racing descendió a Segunda División B.

Ceballos seguiría siendo imprescindible para todo entrenador, ayudando a su equipo a recuperar la categoría y celebrando dos años después el histórico ascenso a Primera, con Paquito de entrenador.

- Entonces llegaría una maravillosa racha de partidos por la máxima categoría, ocho años en los que Ceballos pudo demostrar su alto nivel bajo el marco de El Sardinero... y así se mantuvo durante años.

Una vez más, el Racing de Santander se iba a ver en la categoría de plata, pues en el año 2001 nada se pudo hacer por eludir al descenso. Para volver a Primera confiaría más en el belga Erwin Lemmens. 

Fueron 9 los partidos que tuvo Ceballos en aquel año de ascenso, aguantando una temporada más en el club cántabro, hasta colgar definitivamente los guantes con 34 años de edad. Con el Racing en la alta competición y a salvo, el de Pámanes se puso a trabajar como entrenador de porteros.

¿Te acuerdas de Joan Capó?

- Mucha gente no recordará al Sabadell en Primera División, ya que su última aventura por la categoría fue casi a finales de los ochenta. Joan Capó fue uno de los guardianes de este histórico club catalán. 

Con el Sabadell llegó a competir en tres divisiones diferentes, siendo testigo directo de los mejores y peores momentos del club, al que representó durante la mayor parte de su carrera deportiva.

Formó parte del F.C. Barcelona, pero nunca llegó a debutar para el primer equipo. Con el Celta de Vigo también compitió en la alta competición, en la que este guardameta tuvo 34 apariciones, nada más. Lo demás, es tratar de recordarle como cromo, tanto del Celta como del Sabadell.

- Bueno, también recuerdo que se le apodó "El Portero Descapotable". De Joan Capó Coll sé bastante más por sus años como jugador del Celta, club cuya historia me sé de memoria.

Míticas son sus estampas, con esa calvicie de toda la vida, de unas colecciones que ya casi pasaron al olvido. Y es que la carrera de este portero se resolvió entre los años setenta y ochenta.

Capó nació en la localidad balear de Ciudadela (España), el 13 de noviembre de 1954. En su zona empezó a jugar al fútbol, llegando al Atlético de Ciudadela, que entonces militaba en Tercera División. Por entonces, Joan Capó contaba con diecisiete años de edad.

El F.C. Barcelona se haría con los servicios del joven guardameta, que entonces tenía más pelo. Llegaría a entrar en alguna convocatoria del primer equipo, pero finalmente prestaría sus servicios al conjunto filial, con el que llegó a jugar 4 partidos en la categoría de plata.

Tendría una breve etapa con el Terrasa antes de llegar al Sabadell, que entonces se hallaba en la tercera categoría del fútbol español. En cosa de dos años, el equipo barcelonés celebraría el ascenso a Segunda División.

Joan se convertiría en todo un ídolo por la Creu Alta, siendo indiscutible en la portería durante aquellas dos temporadas en las que se luchó por sobrevivir en la categoría. En ella seguiría el Sabadell, y también el meta balear, pero esta vez con el Celta de Vigo, al que se unió de cara al curso 79\80.

Capó jugaría unos cuantos partidos de aquella temporada que terminaría con dramático descenso a Segunda B, en la que el equipo vigués iba a durar muy poco, gracias a la contratación del técnico Milorad Pavic.

- Aquel Celta batió récords, pasando de competir en el tercer nivel a Primera en cuestión de dos años. Entonces sí, Joan Capó, tendría la ocasión de debutar en la alta competición española a partir de 1982.

El cancerbero balear tuvo 11 apariciones como céltico en aquella campaña en la que Javier Maté sería el titular. Poco duraría la alegría por Vigo, que descendería a Segunda en 1983. Capó abandonaría Balaídos.

Sería un buen momento para retornar al Sabadell, con el que volvería a ser el protagonista bajo palos para poder jugar de nuevo en Primera, entre 1986 y 1988. En la segunda temporada, Manzanedo fue el arquero titular. Con el descenso del equipo arlequinado, Capó se retiraría tras el descenso a Segunda.

¿Te acuerdas de Óskar Tabuenka?

- Sin ser un jugador de fino toque y reconocida calidad, Oskar Tabuenka fue un buen defensor que llegó a competir en Primera durante muchos años y, por tanto, fue cromo para nuestras manos en muchas ocasiones.

Con el Athletic de Bilbao tuvo varias temporadas por la élite, buscándose el sitio en la titularidad sin poder conseguirlo. Eso sí, en aquella etapa como rojiblanco, consiguió competir por Europa, aunque nunca optó a títulos.

También jugó para el Compostela en la categoría máxima, aunque fue durante un año. No corrían buenos tiempos para la entidad galaica y acabaría soportando una dura crisis que le llevó a Segunda y a un futuro muy negro. Tabuenka pasó por otros clubes como el Granada y Aurrera de Vitoria.

- Óscar Javier Tabuenka Berges era capaz de jugar como defensa central o lateral diestro. Sin ser un jugador de grandes recursos técnicos, cumplía bien en la zaga y se vaciaba en cada encuentro. En mi opinión, era todo un profesional.

Nació en Bilbao (España), el 24 de abril de 1971. Producto de Lezama, Tabuenka se fue forjando en las categorías menores del equipo vizcaíno, pasando por el filial, donde fue teniendo sus ocasiones con Iñaki Sáez.

Mientras, el joven defensor empezaría a tener sus primeras apariciones con los mayores en aquellos inicios de los noventa, que es cuando pudo debutar en Primera División a las órdenes del ilustre Javier Clemente.

El 28 de octubre de 1990, el rubio de Barakaldo nos sorprendería con Tabuenka de titular en San Mamés. Frente al Mallorca como visitante, el Athletic se impondría por un cómodo 2-0, y Tabuenka pudo completar con éxito los noventa minutos.

No sería fácil asegurarse un puesto en la primera plantilla, aunque Oskar seguiría teniendo algunas apariciones en aquella campaña, tanto en Liga como en la competición copera, en la que los de Clemente no pudieron llegar muy lejos. 

El canterano seguiría compaginando apariciones entre el filial y el primer equipo, y así seguiría siendo hasta que Iñaki Sáez le otorgo una plaza en el plantel profesional de cara al ejercicio 91\92.

Tabuenka sorprendería con 4 tantos en 15 partidos, pero no le sería fácil ganarse la titularidad ante la competencia de jugadores como Andoni Lakabeg, Genar Andrinua, Rafa Alkorta e Íñigo Larraínzar.

- Aquel Athletic optó a competir por Europa, y Tabuenka aún disfrutaría de aquella experiencia, permaneciendo en el primer equipo durante ocho años en los que nunca pudo asegurarse el puesto de titular. Sin más que hacer por San Mamés, Oskar abandonaría la entidad rojiblanca en 1998.

Ficharía por la S.D. Compostela, equipo con el que pudo competir un año más en Primera División, para así totalizar en la categoría unas 115 apariciones en las que dejó 7 tantos, uno de ellos con el cuadro gallego.

Seguiría un año más en aquel "Compos" que descendió a Segunda, para luego unirse a un Granada con el que ya afrontaría un nivel más bajo. Tabuenka se retiraría en 2002, con el Aurrera de Vitoria.

¿Te acuerdas de José Mari Romero?

- La cantera sevillista siempre nos estuvo descubriendo impresionantes futbolistas, como fue el caso de José María Romero Poyón, un hombre que, tras retirarse, decidió mantener una figura más musculada y es casi irreconocible actualmente. Menos mal que no le dio por utilizar su segundo apellido en el mundo del balompié.

Todavía estábamos en plena década de los noventa cuando José Mari irrumpió en la Primera División española, en la que iba a disputar un buen número de partidos con Sevilla, Atlético de Madrid y Villarreal.

Incluso llegó a jugar para el Betis, el gran rival sevillista. También lo intentó por el Calcio italiano con el AC Milan, y apuró los últimos duelos de su carrera con equipos como el Nàstic de Tarragona y Xerez.

- José Mari nació el 10 de diciembre de 1978 en Sevilla (España). Llegué a coleccionar en alguna ocasión cuando este delantero ya estaba en activo, cuando ya figuraba como una de las grandes promesas del fútbol español.

Llegaría a ser internacional con la selección española, tanto con los equipos menores como con el nivel absoluto, ya cuando se había ganado un gran prestigio en la Liga Española.

Pero antes, José Mari iría progresando en la cantera del Sevilla F.C., destacando en el filial hasta dar el paso al primer equipo, que entonces contaba con José Antonio Camacho en la dirección. Los informes de sus goles convencieron al de Cieza.

El 2 de febrero de 1997, Camacho le otorgaría la titularidad ante la Real Sociedad, que visitó el Sánchez Pizjuán para llevarse una sufrida victoria por 2-3. El joven debutante dejaría buenas sensaciones, así que se ganaría el derecho a continuar en el primer plantel.

De pronto, José Mari estallaría como un brillante goleador, estrenándose frente al Atlético de Madrid, y añadiendo 6 dianas más a su única temporada como sevillista. En general, el año no fue bueno para el club, que descendió a Segunda.

José Mari se marcharía para seguir creciendo por la élite, así que se uniría al Atlético de Madrid. En su primer año, tuvo bastantes minutos con Radomir Antic, y más aún con Arrigo Sacchi. Por desgracia, nuevamente se vería luchando por la permanencia, y el Atleti bajaría a Segunda en pleno cambio de milenio.

Pero el delantero andaluz se marcharía antes de la debacle, y aceptaría la propuesta de irse a la liga italiana para jugar en el AC Milan, donde iba a pasar algo más de dos temporadas.

- Tampoco logró sacar títulos de su paso por San Siro, en lo que fue su única experiencia por el extranjero. José Mari volvería al Atlético de Madrid, para el que jugaría de cara al curso 2002\03.

Ya lejos de Manzanares, el sevillano tendría cuatro temporadas en un Villarreal que ya tomaba aires de grandeza. En El Madrigal estuvo hasta 2007, cuando decidió fichar por el eterno rival sevillista.

De nuevo, José Mari se vería peleando por la permanencia tras unos años compitiendo por Europa. Despediría con el Betis su participación en Primera, en la que disputó 270 partidos e hizo 49 goles. Después jugaría en segunda con equipos como el Nàstic y el Xerez Deportivo.

¿Te acuerdas de Julen Lopetegui?

- Otro buen guardameta vasco que ha tenido nuestra querida Liga Española, internacional por la selección en una ocasión ya la que no hace mucho estuvo a punto de conducir por el Mundial de Rusia 2018 como entrenador. Y es que, actualmente, Julen Lopetegui es un afamado profesional de los banquillos. 

Empezó su vida deportiva con la Real Sociedad, aunque nunca llegó a tener la posibilidad de debutar con el equipo mayor. Tras formarse en la cantera del club de su ciudad, Julen ingresaría en la cantera del Madrid.

Así fue como se presentó en Primera División, llegando a ser también suplente en el eterno rival y defendiendo el marco de otros como el C.D. Logroñés, Las Palmas y Rayo Vallecano.

- Como muchos otros guardametas de su quinta, tuvo que conformarse con ser suplente en equipos grandes, como suelo decir, ganando títulos desde el banquillo.

Julen Lopetegui Agote fue un buen arquero que nació en la localidad guipuzcoana de Asteasu (España), el 28 de agosto de 1966. Siendo muy joven, ingresó en la cantera de la Real Sociedad.

Nunca tuvo otra opción que representar al filial "txuriurdin", entrando en alguna convocatoria de Alberto Ormaetxea, quien ya tenía la portería bien guardada con el mítico Luis Arkonada. Sin sitio en la Real, Lopetegui se marcharía a la capital española en busca de un sueño.

Concluiría su formación con el Real Madrid, jugando durante tres años para el Castilla y cumpliendo con una breve cesión en la Unión Deportiva Las Palmas. Con el equipo canario compitió también en Segunda División. 

Lopetegui volvería a Madrid con la mente puesta en ganarse un sitio en la primera plantilla, dirigida por un John Toshack que ya disponía de otros buenos cancerberos como los gallegos Paco Buyo y Agustín Rodríguez.

Aunque nunca conseguiría ser titular por el Santiago Bernabéu, al menos tendría la oportunidad de debutar en la élite con el club blanco. El meta vasco solamente jugaría ese partido para el Real Madrid, en aquel derbi madrileño ante el Atlético que se resolvió con empate a tres.

Sin más que hacer por Madrid, Lopetegui se marcharía a La Rioja para fichar por el Logroñés. En este equipo sí conseguiría la titularidad, disputando un gran número de partidos en la máxima competición y realizando grandes paradas que llamarían la atención de la directiva del F.C. Barcelona.

- En la Ciudad Condal le pasaría tres cuartos de lo mismo que por la capital. Además de presumir cromo blaugrana, Julen Lopetegui pudo decir que formó parte del glorioso "Dream Team" de Johan Cruyff.

Solamente tendría 5 apariciones ligueras con el Barça, pues por delante del guipuzcoano estuvieron Carles Busquets y Jesús Angoy. Bobby Robson contaría después con el luso Vítor Baía, por lo que Julen tendría que abandonar el club.

Después de alzar títulos sin protagonismo en Madrid y Barcelona, Lopetegui buscaría de nuevo el rol titular en otro modesto club. Se iría a un Rayo Vallecano con el que consiguió ascender a Primera, en la que ya finalizaría su carrera con 149 partidos en la élite, mas toda su experiencia en Segunda.

¿Te acuerdas de Gabino Rodríguez?

- Ahora que el R.C.D. Espanyol está en riesgo de descenso, me he acordado de una de aquellas pocas temporadas en la que el club catalán se vio en Segunda, y Gabino estaba dentro de su plantilla. Por suerte, no se tardaría en recuperar la categoría, en la que este centrocampista jugaría por última vez.

Fue "Perico" durante tres años, pero mucho más tiempo estuvo con el equipo de su ciudad, el Real Betis Balompié. Con este club se presentó en Primera y pudo disponer de sus primeros cromos como futbolista.

Durante un tiempo, Gabino fue titular con el cuadro bético, aunque también tuvo tiempo a pasar por otros equipos como el Logroñés y Xerez Deportivo. Su retirada se confirmaría con la A.D. Ceuta.

- Es de esas estampas coleccionables que más recuerdo de mi infancia, más que nada, porque en mi barrio había un chaval con su mismo nombre al que iba a vacilar siempre con el cromo en la mano... cosas de niños.

Gabino Rodríguez Rodríguez fue un mediocampista de corte ofensivo con muy buen golpeo de pelota y goleador. Nació en la ciudad de Sevilla (España), el 18 de junio de 1964.

Conocido en el mundo del deporte por su nombre de pila, fue un talento pulido en la cantera del Betis, un jugador que fue progresando, pasando dos años en el filial hasta llegar al primer equipo en pleno curso 1983\84.

Se encontraría con profesionales de la talla de José Ramón Esnaola, Rafael Gordillo, Antolín Ortega y el gran Poli Rincón. Junto a ellos, Gabino iba a disfrutar de sus primeros minutos por la Primera División española.

Con Pepe Alzate debutaría el 4 de febrero de 1984, contando con unos minutos en Atotxa, frente a la Real Sociedad. El encuentro se resolvería a favor del conjunto vasco, por 1-0. De ahí al final de aquella campaña, el medio sevillano tendría otras 4 apariciones. 

Jugó cedido para el Logroñés durante un año, en la categoría de plata. De nuevo en Sevilla, Gabino entraría en los planes de Luis Cid Carriega, con quien ya se ganaría la titularidad.

Gabino pasaría a ser un jugador importante dentro de la plantilla bética, jugando bastantes partidos como titular y haciendo sus primeros goles por la alta competición (5), el primero de ellos en el Benito Villamarín frente al Sporting de Gijón. En las próximas temporadas seguiría en la misma línea.

- Tras muy buenos años de iniciación en la primera categoría, Gabino contaría con ofertas para seguir creciendo en su carrera, y a finales de los ochenta sería presentado como nuevo fichaje del Espanyol.

Aunque disputó bastantes partidos en aquel ejercicio 88\89, el equipo catalán acabaría acusando una mala temporada y descendería al segundo nivel. Eso sí, no tardaría mucho en volver a Primera División.

Gabino jugaría un año más para el Espanyol, para completar en la alta categoría unas cifras de 161 apariciones en las que hizo 19 tantos. Volvería a jugar para un Betis que se hallaba en Segunda, para luego irse al Xerez. Disputaría los últimos partidos de su profesión con el Ceuta.

¿Te acuerdas de José Manuel Ochotorena?

- Si hay un portero mítico de la Liga Española, ese es José Manuel Ochotorena (Otxotorena), quien pasó por varios equipos de Primera División, buscando siempre asentarse en la portería.

Salió de la cantera del Real Madrid, y aún tuvo la oportunidad de jugar para el primer equipo y alzar varios trofeos. A finales de los ochenta, cambiaría de camiseta blanca, para jugar en el Valencia C.F.

Desde los años ochenta, Ochotorena ya era un cromo muy conocido por las editoriales, internacional por la selección española en una ocasión y representante de otros clubes del primer nivel como el C.D. Logroñés, Tenerife y Racing de Santander. En Logroño terminaría su carrera deportiva.

- Yo le recuerdo como un portero fuerte de muy buenos reflejos. José Manuel Ochotorena Santacruz nació en San Sebastián (España), el 16 de enero de 1961.

Pronto dejaría su tierra para labrar sus inicios en la cantera de uno de los clubes más grandes del mundo, el Real Madrid. En el filial merengue competiría con otros guardametas de gran proyección como Agustín Rodríguez, Miguel Recio y el mejicano Elola.

El joven arquero donostiarra comenzaría a realizar una gran labor con el filial, y eso le llevaría a entrar en sus primeras convoctaorias con el plantel profesional, dirigido entonces por Vujadin Boskov.

El 11 de abril de 1982, Ochotorena saldría como titular en Castalia para medirse a la delantera del Castellón. En un partido muy trabajado, el meta vasco encajaría un tanto, pero el Real Madrid vencería por 1-2.

Ochotorena seguiría jugando para el equipo menor blanco, aunque se acabaría asentando en el primer equipo, con Amancio Amaro al mando del vestuario. Entonces, el gallego Miguel Ángel figuraba como el primer portero del cuadro madridista. 

Llegó a tener sus opciones para cubrir el marco blanco, disfrutando de varios éxitos, los primeros de su carrera: tres campeonatos de Liga, dos Copas de la UEFA y la extinta Copa de la Liga.

Para buscar más protagonismo, Ochotorena se marcharía al Valencia, donde sí conseguiría convertirse en el cancerbero titular del equipo ché. En su primera campaña por Mestalla, el guipuzcoano conseguiría quedar como el portero menos goleado de la Liga Española, por tanto, ganó el Trofeo Zamora.

- En sus cuatro años por Valencia, Ochotorena disfrutó casi siempre de la titularidad, hasta que se hizo con el sitio en la portería su tocayo José Manuel Sempere. Durante los próximos años, el donostiarra jugaría para otros equipos de Primera, con los que totalizaría 167 encuentros en la categoría.

Volvería a coincidir con Agustín en el Tenerife, quien se adueño del marco de los isleños en los dos años que pasó Ochotorena por el Heliodoro Rodríguez, de donde se iría al Logroñés.

En el equipo riojano repartió sus minutos con Iñaki Vergara, marchándose posteriormente al Racing de Santander, donde pasó un par de años. Después volvería a Logroño, donde se retiró en 1998.

¿Te acuerdas de Tito Vilanova?

- Todos conocemos su última tarea en los banquillos, sobre todo por lo que hizo con el F.C. Barcelona. Lástima que no se pudo ver más de él, puesto que un cáncer acabó con su vida cuando había estado en Nueva York, en pleno tratamiento. Tito Vilanova murió joven, con 45 años de edad, el 25 de abril de 2014.

Solo con el Celta tuvo la oportunidad de debutar en la Primera División española, aunque nunca pudo resaltar pese a las altas expectativas que se habían puesto en un centrocampista salido de la cantera del Barça.

Al final, su carrera se resolvió por las categorías más humildes, jugando para clubes como el Real Mallorca, Badajoz, Elche, Lleida y Gramenet. También pasó por el Figueres antes de llegar a Vigo.

- Por mi apasionada afición al Celta, yo sí recuerdo su aparición en los adhesivos de las colecciones por los años noventa. Tuve todos sus ejemplares en mis manos y los vi mil veces, como las de otros futbolistas que pasaron por el club olívico.

Pero antes, Francesc Vilanova Bayó se estuvo formando en la cantera del F.C. Barcelona, donde fue adquiriendo una gran fama, compartiendo vestuario en el filial con su amigo Pep Guardiola.

Nacido el 17 de septiembre de 1968 en la localidad catalana de Bellcaire d'Empordà (España), terminó de forjar sus inicios en el Barça para fichar por el Figueres, ya que nunca tendría oportunidades con el primer equipo, manejado por Johan Cruyff.

Tuvo un buen papel en Segunda con el Figueres, demostrando ser un mediocampista goleador y con clase para que otros clubes de mayor nivel tomasen nota de sus progresos y, entre esos equipos, se hallaba el Celta de Vigo, al que se unió tras la celebración de los Juegos de Barcelona 92.

Con el regreso a la máxima categoría, el Celta de Txetxu Rojo estaba formando una buena plantilla, en la que figuraban los Vladimir Gudelj, Santi Cañizares, Jorge Otero y un recién fichado Vilanova.

El mediocampista catalán llegaría con la vitola de gran promesa barcelonista, dispuesto a irrumpir en una Primera División en la que ya debutaría el 6 de septiembre de 1992. En un derbi gallego disputado en Riazor, tendría escasos minutos, perdiendo ante el Dépor por 2-0.

Ya en la siguiente jornada, Tito Vilanova sería titular en Balaídos frente al Valencia, pero su rendimiento no llegó a convencer. Aún así, Rojo trataría de concederle más minutos para darle confanza en el alto nivel.

- Vilanova no conseguiría ganarse al público vigués. Acabaría su primera temporada como céltico con 19 apariciones y pocas fueron de inicio. En los siguientes años, aún la cosa iría a peor para el mediocampista.

Tan solo jugaría un total de 26 partidos en Primera durante sus tres años como jugador celeste, eso sí, al menos pudo dejar un gol como despedida en su último año. A mediados de los noventa, Vilanova saldría del Celta.

Ficharía por el Badajoz, con el que competiría por la categoría de plata, como haría con un Mallorca que ascendería al máximo nivel. De ahí saldría al Elche, con el que ascendió a Segunda antes de recalar por la Gramenet, club al que dedicaría sus últimos partidos antes de convertirse en un buen entrenador.

¿Te acuerdas de Claudio Arzeno?

- Durante unos años tuvimos a este zaguero argentino por la Liga Española, por lo que hubo tiempo para coleccionar sus cromos y pegarlos en nuestros álbumes. Arzeno empezó jugando para Independiente de Avellaneda, y nunca tuvo la posibilidad de jugar para la selección nacional de Argentina.

Llegó a España para presentarse como miembro del Racing de Santander, para el que jugó durante cinco años, cuatro de ellos en Primera División, ya que tuvo la mala suerte de sufrir un descenso.

Tras recuperar la categoría, Arzeno pasaría un año más en la entidad cántabra, la cual abandonó para unirse a Las Palmas, entonces en Segunda B. Anteriormente había estado en el Chacarita Juniors.

- Así pues, es probable que le recordéis mejor por sus años con el Racing. Lo cierto es que me sorprendió su fichaje por un equipo de la categoría de bronce, aunque este central ya estaba asumiendo su retirada profesional.

Claudio David Arzeno Pessuto era conocido también como "Polaco", supongo que por sus raíces familiares o por su piel calara y cabello rubio.  Este central nació el 16 de octubre de 1970 en Villa María, Córdoba (Argentina).

Nunca me pareció un jugador de gran calidad, aunque en la retaguardia solía cumplir a la perfección. Tal vez, Arzeno sea un tipo que me traiga más recuerdos de sus apariciones en colecciones o en videojuegos.

Con Club Atlético Independiente tuvo la oportunidad de crecer como futbolista, dando el salto profesional a finales de los ochenta, cumpliendo con 111 apariciones con el cuadro de Avellaneda, donde permaneció hasta el momento de viajar a España, en 1998.

Llegó a un Racing de Primera, que estaba dirigido entonces por un viejo conocido como Nando Yosu. En la plantilla estaban otros buenos jugadores como Federico Magallanes, Víctor, Pedro Munitis, José Emilio Amavisca y el ruso Vladimir Beschastnykh.

El 20 de septiembre de 1998, Arzeno jugaría su primer partido en nuestra Liga, recibiendo en casa al Real Betis Balompié. El zaguero argentino tuvo apenas cinco minutos de juego, ayudando a cerrar una victoria por 1-0.

Arzeno no entró con buen pie en la competición española, ya que en su siguiente aparición haría un autogol frente al Zaragoza. Eso sí, también haría goles en la meta contraria, dos en su primer año como racinguista.

- Acabó el primer curso siendo titular, una titularidad que defendería pese a los constantes cambios de entrenador y a los malos momentos que llegarían, pues también hubo momentos para las lágrimas.

El Racing de Santander bajaría a Segunda en el año 2001, aunque pronto recuperaría la categoría con un joven Quique Setién de entrenador. Arzeno apenas tendría apariciones a partir de entonces.

Claudio Arzeno aguantaría unos meses más por El Sardinero, terminando su experiencia por la Liga Española con 98 partidos y 7 goles. Volvería a su país para jugar en el Chacarita Juniors, aunque nos sorprendería con su regreso a España para unirse a Las Palmas, con el que se retiró en Segunda B.

¿Te acuerdas de Agustín Gisasola?

- Grandísimo defensa eibartarra que pasó casi toda su carrera en el Athletic Club de Bilbao, y podríamos reiterar lo de grandísimo en el aspecto físico, pues conocidos fueron sus problemas de sobrepeso, algo que le perjudicó a lo largo de su carrera, aunque no le impidió triunfar como el buen futbolista que fue.

Tuvo sus inicios con el Eibar, de donde pronto salió para unirse al Athletic, con el que ganaría la Copa del Generalísimo en sus inicios de rojiblanco. A partir de entonces, Gisasola sumaría muchos partidos en Primera División.

En total, llegó a disputar 258 partidos en la alta competición española, en la que además dejó 17 tantos. Como colofón, celebraría el título de Liga antes de retirarse, a los treinta años de edad.

- Será siempre recordada su inmersión en la ría de Bilbao cuando estaba celebrando su último título como "zurigorri", en aquellos últimos años en los que se pudo sacar la "Gabarra" de paseo.

Fue internacional por España desde las categorías menores, aunque pocas veces se calzó la elástica roja con el combinado absoluto. Agustín Gisasola Zabala fue un central fuerte, con buen toque de balón que podía jugar también como mediocampista de contención.

Se recuerdan, sobre todo, sus potentes disparos, bautizados como "Gisasolazos". Este defensa nacido el 22 de julio de 1952 en Eibar (España), empezó a hacerse popular en los comienzos de los años setenta.

Difícil será disponer de alguno de los cromos en los que haya posado Gisasola a lo largo de su carrera, quien pasó de iniciarse con la S.D. Eibar antes de fichar por el Athletic de Bilbao, que entonces estaba en manos de Ronnie Allen. Con el inglés, Agustín daría el salto profesional.

Gisasola saltó al césped de San Mamés el 31 de enero de 1971, para recibir al Celta de Vigo en un duelo que se resolvería con victoria rojiblanca de 2-0. Unas jornadas después, el joven eibartarra se estrenaría como goleador en la visita a Los Cármenes, donde se empató a dos frente al Granada.

Cerró su primer año con una decena de apariciones y, poco a poco, se fue ganando el sitio. Ya con Misha Pavic se hizo titular, celebrando con el yugoslavo su primer título: la Copa de España de 1973.

En su dilatada trayectoria deportiva, Gisasola coincidiría con grandes talentos del fútbol vasco, hombres como José Ángel Iribar, Txetxu Rojo, Alexanko, Andoni Goikoetxea y Manu Sarabia.

- Agustín Gisasola pasó muchos años compitiendo a un altísimo nivel, disfrutando de noches europeas, aunque también perjudicado por su estado físico, ya que tenía cierta facilidad para coger kilos.

Siguieron pasando los años, y el eibartarra ya era todo un veterano que acogería a otros jóvenes talentos con los que celebraría su último título, profesionales como el meta Andoni Zubizarreta o Ismael Urtubi, entre otros.

Con la llegada de Javier Clemente al banquillo de San Mamés, el Athletic iba a iniciar otra gloriosa etapa que se presentaría con el título de Liga de la temporada 82\83. Con aquella última gesta, y esa caída a las aguas de Bilbao, Gisasola daría por finalizada su trayectoria profesional.

¿Te acuerdas de Bernd Schuster?

- Imposible olvidarnos de uno de los grandes clásicos de nuestros queridos cromos, un centrocampista germano internacional que llegó a ser campeón europeo en Italia 80 y que responde al nombre de Bernhard Schuster. Este mago del balón llegó a representar a los tres "gallitos" de nuestra Liga.

Procedente del F.C. Köln, aterrizó en España para fichar por un Barcelona que entonces contaba con muy buen equipo. En sus ocho años como blaugrana, Schuster ganó muchos títulos.

También los ganó con el Real Madrid, eterno rival para el que jugaría dos años antes de recalar en el Atlético de Madrid. Luego jugaría para el Bayer Leverkusen y se retiraría por México.

- También podemos conocer su historia como entrenador si pincháis sobre su nombre: Bernd Schuster. Al igual que hizo como futbolista, años después se sentaría en el banquillo del Santiago Bernabéu para entrenar al Madrid. También dirigió a otros clubes españoles.

Fue uno de los más talentosos jugadores alemanes que vi en mi vida, un hombre que marcó mi infancia. El 22 de diciembre de 1959 nació en la ciudad de Augsburgo (Alemania), y allí mismo se configuró como una de las grandes promesas de su país.

Se profesionalizó jugando para el F.C. Köln, con el que ya se había labrado una gran fama que le llevaría a competir en la Liga Española. Bernd ficharía por un Barça que entonces estaba gestionado por otro grande del balompié como Ladislao Kubala.

Schuster coincidiría en una gran plantilla, junto a otros talentosos futbolistas como Alexanko, Allan Simonsen, Quini y Diego Armando Maradona. El alemán debutaría en La Liga a principios de noviembre de 1980, en una victoria a domicilio contra el Hércules.

Al banquillo del Camp Nou llegaría el gran Helenio Herrera, para cerrar una temporada en la que solamente se pudo celebrar la Copa del Rey. La llegada de otros títulos más importantes era cuestión de poco tiempo.

Mostrándose como uno de los grandes líderes del cuadro blaugrana, Schuster alzaría otros títulos: otras dos Copas del Rey, dos ejemplares de la Copa de la Liga, una Recopa de Europa, la Supercopa nacional y un campeonato de Liga, ya con Terry Venables al mando de los barcelonistas. 

Ocho temporadas pasó jugando para el Barcelona el internacional alemán, abandonando la entidad catalana justo cuando iba a nacer el famoso "Dream Team". Schuster cambiaría al rival eterno en el verano de 1988.

- Para el Real Madrid jugaría un par de temporadas, teniendo el tiempo suficiente como para seguir conquistando títulos por nuestras competiciones y empezando a las órdenes de Leo Beenhakker.

Coincidiendo con otros grandes cracks como Emilio Butragueño y el mexicano Hugo Sánchez, Bernd alzaría dos títulos de Liga, otra Copa del Rey y dos Supercopas de España. En 1990 se iría al Atlético de Madrid.

En sus tres años como "colchonero", Schuster se adjudicaría otras dos competiciones coperas y redondearía en la Liga Española unas cifras de 316 partidos y 87 goles. En 1993 volvería a la Bundesliga, donde jugaría para el Bayer Leverkusen. Con el Pumas mexicano colgaría las botas.

¿Te acuerdas de Pascual Parra?

- Ascensos y descensos marcaron la carrera de este cromo alicantino cuya eclosión se dio con el Hércules, club que se encargó de su profesionalización, donde empezó y terminó su trayectoria deportiva.

Con el equipo de su ciudad se presentó en Primera División, de la que bajaría y volvería en diferentes etapas de sus años como futbolista. Sin embargo, este centrocampista también fue cromo de otros clubes.

En Primera División también jugó para Real Murcia y Real Mallorca, con los que redondeó unas cifras de 236 partidos y un gol. En sus últimos años con el Hércules, Parra llegó a competir en Segunda B, Segunda y en la categoría de oro, en la que se retiraría con un triste descenso en 1997.

- Posó para tres equipos en las colecciones de los años ochenta y noventa. Pascual Luna Parra fue un clásico fichaje o un "repe" de toda la vida que llegó a jugar para los equipos menores de la selección española.

Se hablaban maravillas de este centrocampista que nació el 27 de febrero de 1963 en la localidad alicantina de Biar (España). Con el equipo de su municipio se dio a conocer antes de ingresar en la cantera del Hércules.

El vasco Koldo Aguirre se hallaba al cargo del primer equipo cuando Parra se vio con opciones de debutar en Primera División. Hablamos de la campaña 1980\81.

El 6 de septiembre de 1980, Parra viajaría a Barcelona para tener unos minutos frente al Espanyol. Tuvo poco más de diez minutos, tratando de igualar un encuentro que se cerraría para los locales, por 2-1.
 

Parra siguió contando para el primer equipo en la siguiente campaña, en la que se iba a estrenar como goleador de Primera, ese único tanto que llegó a dejar en la alta competición para lograr un empate en La Romareda, contra el Real Zaragoza (2-2).

Aún no se había establecido en la titularidad del equipo profesional, y poco pudo hacer por evitar el descenso de la temporada 81\82, el primero de su vida deportiva. El medio alicantino se pondría las pilas para ganarse la confianza de Carlos Jurado, con quien se recuperó la categoría en 1984.

El técnico "charrúa" seguiría dándole su confianza en el retorno a Primera, en la que Parra competiría un par de años, puesto que en 1986 optaría por salir de la entidad del Rico Pérez.

- Pascual Parra tendría dos años muy buenos con el Real Murcia, ambos compitiendo en la alta competición, aunque siempre pendiente de los puestos de descenso, algo que marcó su carrera.

En 1988 fichó por el Real Mallorca, con el que empezó luchando por conseguir el ascenso a Primera, obtenido en su primer año con la escuadra balear, en la que se mantuvo hasta 1992.

Con el Mallorca, Parra disputó muchos encuentros en el máximo nivel, abandonando el club tras cuatro temporadas para regresar al Hércules. Con el equipo de su ciudad, Parra empezaría desde la Segunda B y volvería a verse en Primera. En 1997 colgaría las botas, tras bajar a Segunda de nuevo.