- Empezó su carrera fuerte, emergiendo con un Salamanca de Primera con el que ya disputaría partidos importantes. Tomás se mantuvo un para de años por la élite, ya adaptado a la primera plantilla.
Durante casi toda su carrera jugó para el equipo de su ciudad, nada menos que once años como profesional. En todo eso tiempo, el defensor también tuvo que competir en Segunda B, aunque solo fue un año.
Saldría del Salamanca en 2008 para recalar en el Zamora C.F. El resto de su carrera seguiría desarrollándose por la categoría de bronce, pasando por un Cacereño donde estuvo tres años para ir agotando su actividad con otros clubes como el Villanovense y C.D. Guijuelo.
Tomás Jiménez Álvarez no llegó a posar para la compañía Ediciones Este, pero sí le vimos en Mundicromo y otras editoriales que hicieron competencia a la más importante casa de colecciones en España.
Nació en Salamanca (España), el 11 de mayo de 1979. Recibió formación desde muy joven en la cantera de la U.D. Salamanca, llegando al filial para pronto tener sus primeras convocatorias con el conjunto de profesionales.
Andoni Goikoetxea había abandonado el banquillo de El Helmántico y en su lugar se sentó Balta, el hombre que había seguido más de cerca los pasos de Tomás, a quien no tardaría en darle sus primeros minutos tras haber participado en varias sesiones con el primer equipo.
A finales de octubre de 1997, Tomás tendría sus minutos en El Helmántico, para un encuentro de la Copa del Rey. El equipo se medía al C.D. Toledo y la cita se saldó con victoria "charra", por 2-0. El canterano también participaría en otro duelo copero frente al C.F. Extremadura.
Para debutar en Liga tuvo que aguardar al año siguiente, con el argentino Miguel Ángel Russo de entrenador. El 20 de septiembre de 1998, Tomás volvería a contar con los últimos minutos de un partido en casa contra el Deportivo de La Coruña. El Salamanca vencería por 3-1.
La primera titularidad vendría en su siguiente cita, para derrotar también en casa al Athletic de Bilbao (2-1). Aquellos buenos resultados fueron engañosos, ya que vendrían malos momentos para la entidad salmantina.
Tomás había demostrado un buen nivel en sus primeras apariciones, siendo útil para el entrenador, actuando como defensa central, lateral izquierdo o mediocampista de corte defensivo. Sin duda, era polivalente.
Las cosas se fueron complicando según fue avanzando la temporada. Se necesitó fichar varios entrenadores que no darían con la tecla para enderezar el rumbo del equipo, que en aquel ejercicio 1998\99 terminaría descendiendo a Segunda pese al buen inicio de los salmantinos.
- Desde aquella no volvimos a ver a la U.D. Salamanca por Primera División, y lo mismo ocurriría con Tomás, que continuaría vinculado al club de su ciudad en plena crisis económica y deportiva. En el nivel superior acabó su particular experiencia con 10 apariciones, mas lo que jugó en Copa.
En Segunda División tuvo mucho más protagonismo, luchando por volver a la élite y haciendo muy buenos partidos. Todo saldría al revés, ya que el club castellano descendería a Segunda B en el curso 2004\05.
Rápidamente se recuperaría la categoría, y Tomás aguantaría un par de años más por el Helmántico, los últimos en la categoría de plata. El zaguero salmantino abandonaría el club de su tierra en 2008.
Su siguiente equipo fue el Zamora C.F., donde estuvo un año antes de recalar en el Cacereño. Tomás seguiría compitiendo en la categoría de bronce con el Villanovense y se retiraría con el C.D. Guijuelo.
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