- Si hay un cromo mítico para los de mi generación, ese es el de García Pitarch, un delantero que dejó sus dianas en la máxima categoría, aunque destacó mucho más con su puntería en la Segunda División.
Tras jugar para equipos amateurs, tuvo la ocasión de formarse en el Valencia C.F., con el que daría el salto profesional. Fue a partir de entonces cuando posó para las colecciones, que ya estaban causando sensación entre los críos de la época.
Fichó para el Espanyol, pero tuvo que acostumbrarse al segundo nivel con otros equipos, hasta que se unió al C.D. Logroñés. Con el cuadro riojano tuvo sus últimas apariciones en la división de oro, para luego jugar en otros niveles Mérida, Villarreal y Real Murcia.
Su primer equipo importante fue el Atlético Vallbonense, del que pasaría al Valencia C.F. a principios de los ochenta. Empezaría jugando para el Mestalla, aunque también tendría una cesión cercana, jugando en Tercera con el Gandía.
Sus posibilidades de ascender al primer equipo valencianista surgirían a partir de la temporada 1983\84, cuando Paquito García estaba al mando de la plantilla. Él fue quien convocó a García Pitarch por primera vez.
Internacional por las categorías menores de la selección española, este ariete valenciano ya gozaba de una buena reputación, como una flamante promesa que pronto iba a debutar en la Primera División española.
Ocurriría el 8 de enero de 1984. Paquito le daría unos minutos frente al Sporting de Gijón que, como visitante, sacaría una clara victoria por 0-3. También se perdería en la siguiente fecha, en la que García Pitarch se estrenaría como goleador, en Zorrilla y ante el Valladolid 2-1.
Su primer año fue realmente bueno, llegando a ver puerta en 6 ocasiones y acabando como titular, incluso por delante del genio argentino Mario Alberto Kempes. Pero el delantero vallbonense no conseguiría establecerse en la titularidad, y acabaría abandonando Valencia en 1985.
García Pitarch ficharía por el R.C.D. Espanyol. En el equipo barcelonés empezaría teniendo bastantes minutos, dejando 6 dianas en la única campaña que conseguiría convencer al público de Sarrià.
- Jesús García Pitarch acabaría yéndose cedido al Figueres, con el que destacó como goleador en Segunda División. Para poder volver a jugar en Primera, el valenciano ficharía por el Logroñés, previo paso por Orihuela.
Sería una de las armas de ataque para el gallego David Vidal. Sus tantos ayudarían a que el conjunto riojano alcanzase la permanencia, pero en su segundo año por Las Gaunas apenas pudo festejar goles.
En 1993 saldría de un Logroñés con el que terminaría su participación en Primera División, en la que hizo 21 metas en 120 partidos. En los siguientes años jugaría para Mérida y Villarreal, en la división de plata. Con el Real Murcia colgaría las botas en el tercer nivel, ya en 1997.
No hay comentarios:
Publicar un comentario