- Vamos con otro de esos casos de porteros que no pudieron triunfar por la alta competición. Ignacio fue un futbolista que empezó en la cantera del Atlético de Madrid, no contó con oportunidades dentro del primer equipo y tuvo que salir de Manzanares para probar en otros clubes más modestos.
Por la zona de Andalucía fue labrando su porvenir, jugando para un Jaén de la categoría de bronce y un Granada con el que subió a Segunda División. Tras volver a Segunda B, Ignacio tendría mejores propuestas.
Le llegaría una oferta por parte del C.D. Málaga, club de Primera División con el que al fin tendría su presentación por la élite. Desgraciadamente, el meta madrileño no pasaría de ser el típico recambio de banquillo, y eso acabaría forzando su salida de la entidad malacitana.
Se acabarían los cromos para Ignacio que, tras jugar unos años en Segunda con el Málaga, pasaría por modestos equipos como el Extremadura, Talavera, Valdepeñas, Atlético Ciudad Real y Tomelloso, con el que se retiró.
Ignacio Galindo García nació en Madrid (España), el 4 de marzo de 1963. Pocos coleccionables tuvimos de este guardameta, y yo tuve la suerte de poseer los únicos que pudo lucir como jugador del C.D. Málaga. Un poco más lejos, en la capital española, fue formándose en equipos de barrio.
Como miembro de la cantera del Atlético de Madrid fue dando los primeros pasos, perteneciendo al filial y teniendo citas con la primera plantilla durante el curso 1983\84, aunque no fue nada oficial.
Ante la falta de oportunidades, Ignacio ficharía por el Real Jaén, que a mediados de la década competía en la Segunda División B. Dos temporadas pasaría en la entidad andaluza, teniendo siempre la titularidad, hasta que decidió marcharse con el descenso del equipo de la Victoria.
Fichó por el Granada en 1986, donde empezó siendo titular de cara al ascenso a Segunda en 1987. Empezó la temporada siendo titular con Joaquín Peiró, pero acabaría perdiendo su puesto, y poco más permanecería en la entidad nazarí, que había bajado de nuevo a Segunda B.
En medio del ejercicio 88\89, Ignacio Galindo tendría la suerte de poder aspirar a mucho más. El meta madrileño se uniría al C.D. Málaga, que entonces se hallaba en la máxima categoría bajo el mando de Luis Costa.
El técnico alicantino le concedería su estreno en Primera División. Nada más fichar, el madrileño tendría la titularidad en un partido en casa contra el Logroñés, el 19 de febrero de 1989. Buen partido realizaría Ignacio, que dejaría el arco a cero para que su equipo ganase por 1-0.
Contaría con más apariciones en aquella primera temporada con el equipo "Boquerón", aunque el portero titular era Pedro Luis Jaro. El madrileño participaría en duelos frente al Athletic de Bilbao, Sevilla y Atlético de Madrid. Ante los últimos, Ignacio encajó tres tantos y su equipo perdió por 3-0 en el estadio Vicente Calderón.
- Al año siguiente seguiría siendo el suplente de Jaro, aunque tendría la posibilidad de despedirse de la categoría de oro. En marzo de 1990, el arquero madrileño jugaría en La Romareda frente al Zaragoza, donde encajó 3 goles.
Contaría más para la competición copera, jugando todos aquellos encuentros, incluso aquel en el que el Valladolid le metió seis, y que supuso la eliminación del conjunto andaluz. Lo que es en Liga, no jugaría más y el Málaga descendería a Segunda División.
Se mantuvo por La Rosaleda un par de años más, abandonando el club tras el descenso a Segunda B. Después, Ignacio se marcharía al Extremadura, con el que iniciaría el tramo final de su carrera deportiva por los niveles más modestos, compitiendo en Segunda B.
Tras jugar para el equipo extremeño, Ignacio pasaría por el Atlético Ciudad Real, Talavera, Valdepeñas y Tomelloso. Con el modesto club de Ciudad Real finalizaría su trayectoria como futbolista.
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