- Por Valladolid encontró toda posibilidad de alcanzar el nivel profesional, formándose con el equipo pucelano para dar el salto al primer nivel a principios de los noventa, que fue cuando tuvo sus primeros cromos.
Santi Cuesta fue teniendo cada vez más protagonismo con el Real Valladolid, abandonando la entidad tras el descenso a Segunda División. para recalar en un R.C.D. Espanyol con el que viviría más de lo mismo.
Suerte que con el equipo catalán pudo celebrar el ascenso antes de retornar a Pucela, ya para jugar sus últimos encuentros en la división de oro. Después pasaría a jugar para el C.D. Toledo, así como tuvo sus breves etapas con clubes como el Castellón, Ceuta y Cacereño.
Este lateral zurdo tuvo sus cromos con Espanyol y Real Valladolid. En la campaña 94\95 fue estampa para ambos, por aquello de las negociaciones del mercado veraniego. En las siguientes líneas podéis apreciar ambos ejemplares de Santi Cuesta.
- En aquellos adhesivos, este completo defensa figuraba con su nombre y apellido, pero su nombre completo es Santiago Cuesta Díaz. El 11 de agosto de 1971 nació en Avilés, Asturias (España).
No sé bien como se forjaron sus inicios, ya que solo me consta que estuvo formándose en la cantera del Real Valladolid, donde empezó siendo muy joven. A mediados de los ochenta ya era un valor juvenil con miras al primer equipo, algo que no se haría realidad hasta finalizar la década.
Cuesta era internacional por las categorías menores de la selección española y sería tenido en cuenta por Vicente Cantatore en algún momento de la temporada 88\89. Sin embargo, su estreno aún tuvo que esperar.
Al año siguiente sí llegaría el ansiado momento del asturiano. Fernando Redondo contaría con el joven carrilero el 18 de febrero de 1990. El equipo pucelano visitaba el Vicente Calderón, donde esperaba el Atlético de Madrid. Santi sería titular y jugaría todo el encuentro, en el que los madrileños andarían más vivos para llevarse una sufrida victoria por 1-0.
Sus mayores oportunidades llegarían con la presencia Pacho Maturana en el banquillo de Zorrilla. Pese a la alta competencia que había, el técnico colombiano le otorgaría galones para hacerse con el carril izquierdo.
Tal vez no fue el mejor momento para darse a conocer por el máximo nivel, ya que el cuadro vallisoletano sufriría mucho durante aquel ejercicio 1991\92. Yepes sustituiría a Maturana en el banco pucelano, pero no habría forma de evitar el descenso a Segunda División.
El defensa avilesino no continuaría por la zona del Pisuerga, ya que tendría la oportunidad de fichar por el R.C.D. Espanyol, que se hallaba en Primera. Aunque Cuesta no fue capaz de ganarse la titularidad, si es cierto que se repartió muchos minutos con sus compañeros de zaga.
Una vez más, el jugador asturiano iba a padecer la frustración del descenso, ya que el equipo "perico" también bajaría de categoría en aquella campaña 92\93, la que tendría que terminar el técnico Juanjo Díaz.
- El Espanyol iba a recuperar su sitio en la alta competición, pero Santi Cuesta apenas contó para José Antonio Camacho, el entrenador que decidiría no contar con los servicios del avilesino para el curso 94\95.
Es entonces cuando se produce ese cambio de cromos entre Espanyol y Valladolid, como podéis observar en las imágenes anteriores. Con el club castellano, Cuesta iba a tener la oportunidad de despedirse del máximo nivel, en el que llegó a disputar 54 encuentros.
Muy poquito se le vio en su última temporada como jugador blanquivioleta, abandonando la entidad vallisoletana en el verano de 1995, para así comprometerse con un Toledo que se hallaba en la división de plata.
Santi Cuesta estuvo un par de años en la empresa manchega y sus siguientes años serían compitiendo por niveles menores. Del Toledo se fue al Castellón, donde solamente estuvo una temporada. Tampoco duraría mucho su estancia en equipos como el Ceuta y Cacereño.
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