- Actualmente está trabajando como técnico interino del Valencia C.F., equipo en serios apuros y en el que fue futbolista durante años, pues es el club de su ciudad y con el que todo empezó.
Ya sabe lo que es ver al Valencia en Segunda, aunque su misión es evitarlo a toda costa, como ttuvo que hacer en el tramo final de su carrera con el extinto C.D. Logroñés, con el que se retiró a finales de los noventa.
Pero Voro también saboreó la gloria en sus años como futbolista, especialmente cuando jugó para el Deportivo de La Coruña. Entonces ganó trofeos como la Copa o la Supercopa, e incluso consiguió jugar sus primeros partidos con la selección nacional de España.
- Salvador González Marco, aunque en el fútbol se le conoce como "Voro". Este asunto traería miga en los cromos, ya que este defensor apareció en alguna colección como "Boro". Se conoce que alguien andaba muy liado entonces, estudiando las valencias de la tabla periódica.
Y hablando de Valencia, allí nació nuestro amigo Voro, el 9 de octubre de 1963. Fue un rocoso defensa central con pinta de tipo duro y todo, un buen seguro en la zaga que no se complicaba para defender.
En el equipo de su ciudad empieza una carrera futbolística tras dar sus primeras patadas al balón como cualquier otro niño: en el patio, en una campa, en el colegio...
Pronto destacaría con el filial, siendo llamado por Pasieguito para sus primeras concentraciones con el plantel profesional, aunque sin llegar a debutar de forma oficial. El joven zaguero se tendría que seguir puliendo en el Mestalla, y luego se marcharía cedido al Tenerife.
Voro jugaría un par de temporadas en Segunda División, ganando mayor protagonismo con la llegada de Dragoljub Milosevic, para quien iba a ser indiscutible en cada alineación.
A mediados de los ochenta, volvería al Valencia para intentar ganarse el sitio, aunque eran tiempos complicados para el equipo ché, que al término del curso 85\86 descendería al segundo nivel.
Pero el regreso a Primera fue rápido con Alfredo Di Stéfano, y Voro se establecería en la titularidad para sumar un importante número de partidos en la alta división española, optando a algo más que luchar por la permanencia. En 1993, él sería quien abandonaría la ciudad para fichar por otro club.
- Se uniría a un Deportivo que empezaría a gozar de una gran reputación, mezclándose con buenos profesionales como Fran González, Bebeto, Mauro Silva y otro viejo conocido por Valencia como Miroslav Djukic.
Voro tendría bastante protagonismo en aquellos años en los que el "Dépor" casi gana la Liga. Al menos, el muro valenciano no se marcharía sin alzar los trofeos de la Copa del Rey y la Supercopa nacional.
Había tenido muy pocos minutos en su último año por Riazor, por lo que decidió marcharse al C.D. Logroñés. El equipo riojano vivía tiempos convulsos, descendiendo a Segunda en 1997 y aguantando un año más en activo. En Primera, Voro jugó 340 partidos e hizo 9 goles.
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