- Si hubo un delantero que pasó por la Liga Española demostrando que sabía mucho sobre el gol, ese era Baltazar de Morais, un hombre que vino del Botafogo al Celta para sorprendernos a todos.
Fue capaz de ser el máximo goleador tanto en Segunda como en Primera División, aunque en la última solo pudo demostrarlo con el Atlético de Madrid, donde el atacante apenas estuvo tres temporadas.
Aún así, el total de sus números con ambos equipos fueron increíbles, dejando 47 goles en 92 partidos con los gallegos y 53 en 77 apariciones con los madrileños. También supo dejar su huella goleadora con la selección brasileña, para la que anotó en 2 ocasiones de sus 6 citas internacionales.
- Tuve la suerte de vivir su fútbol como celtista que soy. Baltazar Maria de Morais Júnior era un ariete con un don muy especial para ser vistoso y muy certero de cara a la portería.
Nació en Goiânia (Brasil), el 27 de julio de 1959. Salió del Atlético Clube Goianiense para ir marcando sus primeros goles importantes con el Grêmio, Palmeiras y Flamengo. Antes de marcharse a España, Baltazar jugaría para el Botafogo.
En 1985 aterriza en Vigo para fichar por el Real Club Celta, que por entonces no era capaz de sostenerse en Primera División. "O Rei" Baltazar llegaría para aliviar el mal momento con sus goles, debutando en nuestra liga el 31 de agosto, en un partido en Atotxa frente a la Real Sociedad (1-1). Para ver sus primeras dianas habría que esperar solamente tres jornadas.
En el Luis Casanova, el ariete brasileño le haría gol a un fuerte Valencia que ganaría por 3-1. El atacante goianiense dejaría otros cinco tantos en aquella mala campaña 85\86 que acabaría con el Celta en Segunda.
Baltazar explotaría en la categoría de plata, haciendo 34 anotaciones para proclamarse como el máximo realizador de la competición. Con el inglés Colin Addison de entrenador, el conjunto olívico lograría retornar a la máxima categoría.
En Primera no conseguiría ser tan superior, o al menos en su etapa como jugador celeste. Convertiría en 7 ocasiones para el cuadro gallego, en el que ya no continuaría a partir del ejercicio 88\89.
El Atlético de Madrid se haría con la contratación de la nueva sensación céltica, quien iba a jugar a las órdenes de un viejo conocido por Balaídos como José María Maguregui. Como colchonero, Baltazar se estrenaría con gol ante el Real Oviedo, en la cuarta fecha del campeonato y de penalti.
- Aunque le costó, Baltazar acabaría convenciendo a base de muchos goles. Marcaría 35 en 36 partidos, cifras que le convertirían en el ganador del Trofeo Pichichi en aquella campaña 88\89.ç
Al año siguiente bajaría un poco el pistón, aún así, vería puerta en 18 ocasiones. Baltazar se marcharía de España sin títulos colectivos, ya que cuando el Atleti iba a ganar la Copa del Rey, el brasileño se iría cedido a Portugal.
Jugaría el resto de la temporada para el Oporto, de donde se marcharía para probar en la liga francesa con el Rennes. Volvería a su ciudad en 1993, pero terminaría su carrera en Japón, con el Kyoto Purple Sanga. Sus números en Primera fueron de 66 goles en 125 partidos.
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