- Manolo Jiménez es un profesional de este deporte que siempre será recordado como un fiel sevillista, un hombre importante en la historia del club, para el que ha llegado a disputar 354 partidos en su larguísima carrera deportiva. Con esos números, este lateral zurdo es el hombre que más veces ha defendido la elástica blanca del Sevilla.
Fue canterano, entregado jugador, capitán y hasta entrenador del Sevilla F.C. Hasta catorce temporadas llegó a competir para el club de Híspalis, hasta que lo abandonó para retirarse en el Real Jaén.
Es una lástima que, en todos aquellos años, Jiménez nunca ha podido celebrar títulos con el equipo de su tierra, al que siempre representó en todas sus apariciones de las colecciones de aquella época.
Como debe ser, "Manolo" nació en la provincia sevillana, en la localidad de Arahal (España), el 26 de enero de 1964. Su don era correr por la banda izquierda, como un atrevido carrilero que servía buenos centros y defendía con eficacia.
Antes de su evidente aparición en los álbumes de los cromos de fútbol, Jiménez era un joven canterano del Sevilla F.C. que ya prometía antes de pasar al filial, donde permaneció hasta 1984 antes de ser reclutado para el primer equipo, que estaba a las órdenes de Manuel Cardo.
Jiménez debutaría en Primera División el 30 de octubre de 1983. Lo haría como titular en Zorrilla, donde el Real Valladolid ejercía como anfitrión para tratar de convencer a su público. El choque fue realmente disputado, con un empate a tres entre ambos conjuntos.
Al año siguiente se ganaría un sitio en la plantilla de Cardo, quien a la larga le haría titular en aquella zaga sevillista que respaldaba la portería de un Paco Buyo que acabaría yéndose al Real Madrid.
Manolo Jiménez no ser iría, y nunca cambiaría los colores del Sevilla para buscar la suerte en los mejores equipos del mundo. Con su modestia, prefirió ser un hombre de la casa que asumiría un papel de líder en el vestuario durante muchos años.
Finalizando los años ochenta, el de Arahal acabaría siendo uno de los mejores zagueros del país, con bastantes partidos en el máximo nivel e internacional por la selección española.
- Con el paso de los años, Manolo Jiménez acabaría capitaneando al equipo del Nervión, siendo un fijo en cada alineación y con cada entrenador que pasó por el Sánchez Pizjuán.
En su catorce campañas ligado al club andaluz, a Jiménez le faltó alzar un título, algo a lo que sí se acostumbro la afición en los últimos años. Aún fue peor, pues su carrera como sevillista terminó de la peor manera, con el club en plena crisis deportiva y descendiendo a Segunda División.
Así concluiría su larguísima etapa con el equipo de su tierra, ese que solamente abandonaría para finalizar su trayectoria deportiva con un Real Jaén que se hallaba en la misma categoría.
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