- Acabó donde empezó su carrera, con el equipo de su ciudad, el C.F. Palencia. Pero Luis Sierra fue un jugador de sobrada calidad para poder competir en lo más alto, y por ello el Sporting de Gijón se hizo con su fichaje aunque, en principio, el defensor palentino tuvo que empezar jugando para el filial.
No tardaría en competir por Primera División, pasando unos cuantos años en la entidad asturiana, de la que salió para unirse a un Mérida con el que haría historia a mediados de la década de los noventa.
El equipo extremeño ascendería a Primera División, lo nunca visto. Sierra formó parte de aquel glorioso equipo durante unos años, hasta que ya se empezó a cuestionar su existencia y se extinguió.
- Así de duro es el fútbol a veces. Una modesta entidad trató de sobrevivir entre los grandes, y eso acabó generando deudas que solo retendrían a gente tan profesional como José Luis Sierra Mediavilla.
Este defensa central ya lo había vivido todo con el Sporting, que fue el club para el que más veces posó en las colecciones de cromos, con un cierto parecido al recién retirado colegiado Mateu Lahoz. De hecho, en el cambio de equipo, podemos apreciar la evolución de Sierra con sus problemas capilares.
Este profesional del balompié nació en la localidad palentina de Alba de los Cardaños (España), el 7 de diciembre de 1965. Dio los primeros pasos con el Club de Fútbol Palencia.
Fichó por el Sporting de Gijón en 1987, lo que sería un paso muy importante a la hora de dar sentido a su dedicación profesional. Eso sí, Luis Sierra tuvo que empezar jugando para el equipo filial.
Demostraría tener maña para esto del fútbol y pronto sería convocado por José Manuel Díaz Novoa para poder debutar en Primera División. El 24 de enero de 1988, el central palentino sería titular en el viejo campo de Atotxa, donde su equipo perdió frente a la Real Sociedad por 3-0.
Sierra continuaría en la primera plantilla y aprovecharía para hacer su primer gol en la Liga Española, el que le hizo al Cádiz en su tercera aparición, al que se goleó en El Molinón por 3-0.
Al palentino le aguardaban seis años más compitiendo en Primera con el Sporting, ganándose la titularidad incluso en alguna temporada y acumulando bastantes minutos hasta la llegada de la campaña 94\95, en la que el club gijonés iba a tener numerosas bajas, la de Sierra entre ellas.
- El defensor se uniría al Mérida de Sergio Kresic, en el que sería partícipe de un histórico ascenso que llevaría al cuadro emeritense a competir en la élite por vez primera en toda su historia.
Aunque el equipo descendió en 1996, rápidamente se volvería a colar en la división de oro, en la que ya Sierra jugaría sus últimos partidos. Y es que la entidad extremeña tenía serios problemas económicos que le llevarían a desaparecer.
Luis Sierra cerraría su participación en Primera División con 222 partidos y 2 goles, así de redondo. Aguantó en el Mérida hasta el año de su extinción (2000), demostrando un serio compromiso antes de asumir el final de su trayectoria deportiva, para lo que regresó al Palencia.
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