- Este defensa pasó gran parte de su carrera futbolística en el Celta de Vigo, por lo que fue uno de mis cromos favoritos. Nos referimos a él como Gelo Castiñeiras, un jugador santiagués que pasó una década en el club olívico, aunque no tuvo mucho recorrido por Primera División.
Fueron 48 partidos en total, ya que con ningún otro equipo pudo competir en la máxima categoría. Fueron malos años para el Celta, que por aquella época andaba siempre en modo ascensor.
Tras su extensa dedicación a la entidad viguesa, Gelo salió de Galicia para jugar en el modesto Jovent Mollerussa. Volvería a su tierra, para representar al Lalín, y a un Compostela que años después acabaría compitiendo en Primera, aunque ya no con él.
- Pasó gran parte de su vida por los campos de Segunda y Segunda B, pero toca recordar a este zaguero como uno de aquellos cromos que tuvimos cuando fuimos chavales. Ángel Castiñeiras Beiras siempre ocupó las páginas del Celta en los álbumes.
Nació el 5 de junio de 1959 en Santiago de Compostela (España). En su villa natal empezó a jugar a este deporte, con el Vista Alegre. Su talento le llevaría a formar parte del Celta de Vigo, aunque a punto estuvo de colarse en la cantera del Barça, para el que realizó unas pruebas antes de llegar a Vigo.
No eran tiempos fáciles para la afición celeste, pues el equipo se había convertido en un aspirante a Primera que todavía tendría que pasar por niveles aún menores.
Gelo empezaría jugando para Toni Cuervo, aunque sería en la competición de Copa. El 5 de octubre de 1977, el defensa santiagués sería titular frente al Monzón, al que se ganaría por 3-0. También tendría otra aparición en el torneo del k.o. antes de que se produjese un cambio de entrenador.
El Celta acabaría siendo dirigido por José María Maguregui, quien seguiría contando con el joven santiagués, en un gran año que terminó con el ascenso al máximo nivel.
De pronto, llegaría su debut en Primera. El 3 de septiembre de 1978, el Celta iniciaría el campeonato liguero contra el Espanyol en casa, pero la gran tarde quedaría chafada al perder ante el celtismo por 0-1. En aquella campaña78\79, Gelo solamente tendría 16 apariciones.
El equipo gallego iría cayendo en barrena pues, además de descender aquel año, volvería a lamentar una bajada de categoría en la campaña 80\81. Pese a ello, Gelo seguiría jugando para el Celta en Segunda B.
- Con la llegada de Milorad Pavic, el conjunto celeste se prepararía para volver a la élite como una flecha, superando la categoría de bronce y la de plata, siendo Gelo indiscutible para el técnico yugoslavo.
Se mantendría en la titularidad al año siguiente, llorando otro ascenso a Segunda, donde se compitió durante un par de campañas antes de volver. En su último año compitiendo en la Liga profesional, el santiagués solamente tendría 5 apariciones.
Y otra vez con el Celta en el segundo nivel, Gelo seguiría comprometido con el club vigués, hasta que no se contó con él. Fue entonces cuando abandono Vigo para jugar en el Lalín y Mollerussa, uniéndose al "Compos" en 1990, con el que pudo celebrar un ascenso a Segunda antes de retirarse.
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