- Solo por el mero hecho de haber aparecido una vez en nuestras colecciones, Maguy merece ser tratado como todos los demás cromos. De hecho, habría que darle un trato especial, puesto que es reconocido como uno de los mayores fiascos de nuestra Liga y en la historia del Atlético de Madrid.
Venía de jugar del Africa Sports d'Abidjan y afamado por ser internacional campeón con la selección de Costa de Marfil, pero para todos los seguidores españoles era el más desconocido, que duda cabe.
Poco se puede decir de su desempeño por el fútbol español, ya que Maguy se marchó de Madrid con más pena que gloria y continuó su carrera en su país, Arabia Saudí y en Suiza, donde ya colgó las botas.
- A la izquierda vemos el reverso de aquel único cromo que pudimos coleccionar del bueno de Maguy. La empresa de Panini no se olvidó del costamarfileño y nos ofreció un ejemplar, cuya cara delantera veis más abajo.
Posiblemente haya quien no se acuerde de él, pero los más futboleros no podemos olvidarnos de su cara y de su nombre, que de forma completa es Serge-Alain Maguy.
Este centrocampista al que apenas vimos en la Liga Española nació en la ciudad de Abidjan (Costa de Marfil), el 20 de octubre de 1970. Se sabe que su comienzo profesional lo tuvo con el Africa Sports.
Más que sus primeros pasos a nivel de club, Maguy se hizo famoso por su buen papel en la Copa de África que se celebró por Senegal en 1992. Costa de Marfil sería la ganadora al imponerse en la final contra el combinado de Ghana, al que se derrotó en una eterna tanda de penaltis.
Maguy había sido uno de los mejores jugadores de su selección, en la que tampoco figuraban grandes conocidos. El caso es que su fichaje por el Atlético vino motivado por su rendimiento en la Copa África, y así lo aseguró el presidente Jesús Gil y Gil ante los medios.
Lo cierto es que los periodistas no salían de su asombro, y eso pareció molestar al máximo mandatario atlético, quien un poco indignado describió al medio costamarfileño como "diamante en bruto".
Creo que fue la revista "Don Balón" la que quiso dar la razón a Gil, escribiendo un reportaje en el interior de su medio que titulaba como "Oro Negro". El resto sería ver como funciona su juego en nuestra Liga.
Emilio Cruz fue el entrenador que presentó al menudo mediocampista africano en la Primera División española. El 16 de enero de 1994, Maguy tendría unos minutos para jugar contra el Rayo en Vallecas, donde se perdería por 2-1.
Ya en su siguiente aparición sería titular, pero a nadie convencería su juego. Eso sí, los diferentes entrenadores que pasaron por Madrid aquel año tan extraño, llegaron a conceder minutos al medio africano.
El último técnico que le dio minutos fue el argentino Jorge D'Alessandro, quien le dejó despedirse de la afición rojiblanca en un duelo contra el Athletic de Bilbao. Al menos, el Atleti venció por 4-2 y Maguy pudo irse con mejor sabor de boca pese a no triunfar por La Liga, en la que solo contó 8 apariciones.
Con el paso del tiempo se sabría que su fichaje había sido puro interés político del señor Jesús Gil y, como se suele decir por mi tierra, ahí moriría el cuento. El Atlético continuaría con su fútbol y Maguy con su carrera.
Se sabe que volvió a su país para jugar en el afamado ASEC Mimosas, del que pronto saldría para probar en Arabia Saudí con el Al-Qadsiah F.C. Tras representar al Satellite costamarfileño, Maguy volvería a Europa para terminar su trayectoria en Suiza con el modesto Club Sportif Chênois.
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