- Disfrutó de la alta competición con un gran Deportivo Alavés que rozó el título europeo, un maravilloso equipo que nos gustó a todos sin la necesidad de ser seguidores de aquel mítico "Glorioso".
Ibon Begoña fue uno de los centrocampistas que manejaron la batuta del equipo "babazorro", salido del Lemoa y perfeccionado en Lezama con el Athletic de Bilbao, donde no tuvo oportunidades para profesionalizarse. El Alavés fue su guía para triunfar y así llegar a Primera División, en la que concursó durante años.
Fue alavesista hasta el momento que se volvió a ver en Segunda, en la que ya jugaría cedido con el Gimnàstic de Tarragona antes de jugar sus últimos encuentros en la división de oro. Begoña terminaría su profesión futbolística representando al renacido Logroñés y al S.D. Eivissa.
- En total, fueron 145 partidos y 5 tantos en la máxima categoría, mas la opción de figurar en las colecciones de finales de los noventa e inicios del nuevo milenio.
También tuvo la misma oportunidad su hermano Iker, de quien prometo tratar dentro de un tiempo no muy lejano. Ambos triunfaron lejos de su ciudad. También su padre se dedicó al fútbol.
Ibon Begoña Zubiaur nació en Bilbao (España), el 17 de noviembre de 1973. En las filas del S.D. Lemoa ya se empezaron a ver las posibilidades de este centrocampista de brega y mucho trabajo que en 1994 ficharía por el extinto Sestao Sport Club.
Con el Athletic logró profesionalizarse, aunque compitiendo en Segunda División con su equipo filial, con el que tendría que concursar también en la Segunda B tras el descenso de la campaña 1995\96.
Nunca hubo posibilidades de llegar al plantel profesional bilbaíno, por lo que Ibon Begoña abandonaría la ciudad para irse cerca, al Deportivo Alavés. Gracias a su fichaje por el club vitoriano, el mediocampista volvería a jugar en la categoría de plata, la que abandonaría en 1998.
Abandonaría el segundo nivel para llegar a Primera, con Mané Esnal en el banquillo de Mendizorroza, el hombre que convertiría al conjunto "babazorro" en uno de los clubes más de moda en el alto nivel.
Begoña debutaría en la élite el 29 de agosto de 1998, en casa y ante la visita del Real Betis Balompié. El choque se resolvería con un empate sin goles. El Alavés no solo lograría establecerse en la alta competición, además, también se clasificaría para disputar la Copa de la UEFA.
El medio bilbaíno seguiría en el club vitoriano durante unos años más, compitiendo en Primera División hasta que en 2003 se vivió un amargo episodio con el descenso a la división de plata.
En Segunda jugaría también para el Nàstic, retornando al Alavés para tener sus últimas apariciones en el nivel superior, en el que ya no volvería a competir. Atrás quedaron grandes recuerdos, jugando ya para clubes más modestos, como el Logroñés C.F. y Eivissa. Begoña se retiró en 2009.
No hay comentarios:
Publicar un comentario