- Sigamos recorriendo bandas como locos. Nadie lo hacía mejor que Roberto Carlos, ese lateral izquierdo que con la selección brasileña llegó a ganar dos ediciones de la Copa América y el Mundial de Corea-Japón 2002. A nivel de clubes tampoco se quedó corto, sobre todo con el Real Madrid.
En su país empezó jugando con União São João, Atlético Mineiro y Palmeiras, aterrizando en Europa para probar suerte con el Inter de Milan. De ahí, pasaría al Madrid, en el que permaneció once temporadas.
Ganó diversos títulos como madridista, entre los que destaco tres trofeos de la Champions League. También jugó por Turquía, Rusia y la India, llegando a colgar las botas en el Odisha con 43 años de edad.
Potencia y espectáculo al servicio del más futbolero. Este menudo pero fuerte alero tenía una zurda asombrosa. Además de aportar mucho en defensa, sus lanzamientos a balón parado daban auténtico pánico a las defensas rivales.
El 10 de abril de 1973 nació en Garça, São Paulo (Brasil). En Araras comenzó su carrera, con el União São João. Después se iría al Atlético Mineiro y, de ahí, al Palmeiras. Con este equipo conseguiría despertar el interés de los directivos del Internazionale.
Se trasladó a Italia a mediados de los noventa. En el Inter pasó una temporada, dejando grandes actuaciones y sus 5 primeros goles al otro lado del charco. Al año siguiente, el Real Madrid contrataría sus servicios.
Roberto Carlos se pondría a las órdenes de Fabio Capello para debutar en la Liga Española. Esto ocurriría el último día de agosto de 1996, cuando el Madrid visitaba Riazor para medirse al Deportivo de La Coruña. El choque acabaría con empate a uno. El brasileño haría el gol de los blancos.
El carrilero nos asombraría a todos en su primer año por la competición española, interviniendo en 37 encuentros y anotando 5 goles. En lo colectivo, el cuadro "merengue" se haría con el título liguero.
Aquel fue el primer título de muchos. Al año siguiente llegaría la primera Champions de Roberto Carlos con el Real Madrid, éxito que se repetiría en el año 2000 y 2002. Aún se conseguirían otras gestas, con otros dos ejemplares de Liga, dos de la Intercontinental y la Supercopa europea.
- No serían mejores los años posteriores. Surgiría un "Madrid Galáctico" y al zaguero brasileño le acompañarían otros cracks de ensueño que no conseguirían hacer las delicias para el Santiago Bernabéu.
Pero Roberto Carlos aún podría ganar otra Liga antes de marcharse de la capital española. Esto sucedería en el curso 2006\07. A partir de entonces, el crack paulista dejaría de aparecer en nuestras colecciones.
Abandonó España con 370 partidos y 47 goles. Se fue a Turquía para jugar en el Fenerbahçe, y de ahí al Corinthians. Aterrizó en la liga rusa para representar al Anzhi Makhachkala y se atrevió con el fútbol exótico, compitiendo en la India para el Delhi Dynamos, conocido ahora como Odisha F.C.
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