- Vivió sus inicios en el C.D. Logroñés y representó a un club resurgido tras la desaparición del mismo. José Ignacio fue un centrocampista riojano con alta experiencia en Primera, en la que comenzó a competir en 1993.
Fue una de las estrellas del club de su ciudad y pasó a jugar después para el Valencia C.F., de donde se fue al Real Zaragoza. Con el club maño fue campeón de la Copa del Rey, en una final contra el Celta de Vigo.
Y precisamente sería el Celta su último equipo por el máximo nivel. José Ignacio fue protagonista en la histórica participación del equipo gallego en la Champions League. También pasó un año por Segunda, ayudando en el ascenso antes de poner fin a su carrera con el Logroñés C.F.
- Este centrocampista tenía calidad y se movía muy bien. Además de controlar muchos espacios en la medular, era un jugador con llegada y gol. Lo que es en Primera División, totalizó unos registros de 17 goles en 317 partidos.
Tuvimos varios cromos que se sacaron a lo largo de su carrera y con distintos clubes. Pero José Ignacio Sáenz Marín tuvo sus inicios en el extinto C.D. Logroñés.
Este jugador nació el 28 de septiembre de 1973 en Logroño (España). Ya destacaba con el filial a comienzos de los noventa, por lo que José Ignacio no tardaría en subir al primer equipo, dirigido por el argentino Carlos Aimar.
En un encuentro de Copa, el medio riojano sería titular frente al Lleida el primer día de diciembre de 1993. Habiendo mostrado buenas maneras, el canterano ayudaría a su club en una victoria por 3-1.
Acto seguido llegaría su estreno en Liga, ya en el cuarto día del mes de diciembre. Esta vez se viajaría a tierras catalanas para enfrentarse al Barcelona de Johan Cruyff. En aquella gran cita, los logroñeses sacarían un valioso empate mostrando un alto descaro en el Camp Nou (2-2).
José Ignacio tuvo bastantes apariciones en aquella temporada 93\94. Se instaló en la primera plantilla e incluso dejó su primer tanto en la alta competición, que solamente serviría para empatar a uno en casa contra el Rayo.
Al año siguiente, José Ignacio se convertiría en uno de los mejores jugadores del Logroñés, una de las sorpresas de aquella "Liga de las Estrellas" que nada podría hacer por evitar el descenso del equipo de su ciudad. Gracias a una oferta del Valencia, el mediocampista seguiría jugando en Primera.
- Con el equipo "ché" afrontaría retos más ambiciosos, aunque para ganar títulos tendría que fichar por el Real Zaragoza, club al que el futbolista riojano representó durante cinco temporadas.
En 2001 fue campeón de Copa con el cuadro maño, con el que sufriría un descenso al año siguiente. Al Celta le había arrebatado aquel título copero, un equipo competitivo con el que luchó por la Liga de Campeones.
José Ignacio se convirtió en leyenda céltica al ser el goleador que clasificó al Celta en la fase de grupos, saliendo triunfante en una difícil visita a San Siro para medirse al AC Milan. Pero también tuvo la mala suerte de descender a Segunda con el club olívico, al que ayudó a volver a Primera antes de retirarse con el renombrado Logroñés C.F.
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