- De las últimas veces que vimos competir en Primera a un histórico como el Oviedo, pudimos descubrir algunos talentos de su cantera en aquellos lejanos años noventa, y Jaime fue uno de tantos.
Se fue formando en el club de su ciudad hasta que pudo dar el salto a Primera División, algo que ocurriría en la campaña 96\97. Hasta la llegada del nuevo milenio, el centrocampista contaría con diversas apariciones.
Todo termina con la crisis que padeció el club asturiano, lo que le llevó a bajar a Segunda y otras categorías menores. Jaime lo dejaría en la división de plata, en la misma que luego representaría a U.D. Salamanca y Eibar. También jugaría para Astur y Club Marino de Luanco.
Jaime Jordán de Urríes Fernández fue un centrocampista que nació el 2 de febrero de 1977 en Oviedo (España). Jugaría para algún que otro equipo de barrio antes de unirse a la cantera del Real Oviedo, pasando al filial en 1996.
En la Segunda B ya se le notaría esa clase que le permitiría llegar al fútbol profesional. Después de unos buenos años como talento juvenil, Jaime entrenaría con los mayores, con Juan Manuel Lillo al mando de la plantilla.
Pero no sería Lillo, sino un técnico de la casa como José Antonio Novo el encargado de ofrecerle sus primeros minutos en la categoría máxima. El 15 de junio de 1997, el canterano tendría los compases finales de un encuentro a domicilio contra el Valencia, que se perdió por 2-1.
El Oviedo venía de hacer una mala campaña que habría que mejorar al año siguiente con Óscar Washington Tabárez. El técnico uruguayo contaría con el chaval en 13 partidos de Liga y otros 2 de la Copa del Rey.
Jaime ya dejaría el filial para quedarse en la primera plantilla. Ya en el curso 98\99, el centrocampista se estrenaría como goleador de la alta competición, anotando en Barcelona contra el Espanyol. Quizás esa fue su mejor temporada como oviedista, con el equipo asegurando otra vez su permanencia en Primera.
Todo iba a complicarse en los siguientes años. Jaime ya tenía veintitrés años y marcó 4 tantos en un momento muy delicado para el club de su tierra, que al término del ejercicio 2000\01 se vería en Segunda División.
- Así comenzaba una cuesta abajo que casi le cuesta al club "carbayón" la desaparición. Por su parte, Jaime terminaría su andadura por el máximo nivel habiendo hecho 6 tantos en 68 encuentros.
Se trató de devolver al Oviedo a Primera, pero al aficionado del Carlos Tartiere le quedaban años de auténtico sufrimiento. El joven mediocampista asturiano seguiría en la entidad ovetense hasta el año 2003.
Estuvo dos años jugando para el Salamanca, donde su última temporada fue la mejor. Jaime jugaría también para la S.D. Eibar que, al igual que el equipo "charro" acabaría bajando a Segunda B. En esta categoría acabaría representando al Marino de Luanco, tras su breve paso por el Astur.
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