- Descubierto por directivos del R.C. Celta cuando jugaba para el Alondras, Lito tuvo la ocasión de llegar a Primera División tras jugar cedido en el Alcoyano. A finales de los ochenta llegaría su gran momento.
Disputó unos cuantos encuentros con el conjunto celeste, hasta que se descendió a Segunda en 1990. Lito se vería obligado a abandonar su tierra para seguir compitiendo en el máximo nivel, y lo haría con el Real Burgos.
Se aseguró tres años más en las colecciones de aquella época, teniendo más apariciones en su tercer año como "franjipardo". Como el Celta, el Burgos también bajaría de categoría, y el mediocampista continuaría un año más por El Plantío. Acabaría retirándose en Segunda, con el C.D. Toledo.
El de Lito fue un cromo que recuerdo muy bien. En realidad tuvo varias representaciones, pero como celtista solo una, la que vemos justo debajo, con vista trasera y delantera (Temporada 89-90).
La posición de nuestro protagonista era la de un mediocampista con tendencia a jugar por banda izquierda, como lateral, interior o extremo. Así es como se dio a conocer con el Alondras, en Cangas.
En 1988 ficharía por el Celta de Vigo, pero antes habría estado en el Alcoyano, al que representó en Segunda B. Ya de cara al ejercicio 88\89, Lito entraría en los planes del técnico José Manuel Díaz Novoa.
Su estreno en Primera llegaría el 30 de octubre de 1988, en un partido en Balaídos con la visita del Real Betis. El joven Lito contaría con poco más de diez minutos en aquel choque con empate a nada.
El moañés fue contando con más apariciones en aquella temporada en la que el equipo olívico rozó los puestos a Europa. Pocas titularidades tuvo el jugador, algo que se superaría al año siguiente, en una temporada que tendría un final inesperado.
Pese a las ilusiones generadas por Vigo, no fue fácil competir entre los grandes, y eso llevaría al Celta a perder la categoría, con Lito habiendo disputado 22 encuentros, la mayoría de ellos como titular.
Lito no seguiría en el club gallego, ya que encontraría la oportunidad de seguir compitiendo en Primera División. Lo haría con el Real Burgos, a donde se lo llevó Díaz Novoa, quien recientemente había sido contratado por el club castellano de cara a la campaña 90\91.
- Aunque no contó con muchos minutos, el extremo gallego conseguiría hacer su primer gol en la división de oro. Fue en un vibrante partido en El Plantío, con el Athletic de Bilbao como visitante. A falta de un minuto, Lito anotaría el tanto de la victoria burgalesa (2-1).
El conjunto franjipardo conseguiría mantener el tipo en la alta división, como también se haría al año siguiente, habiendo cumplido el gallego con unas estadísticas similares a la del curso anterior.
Todo se complicó con la llegada de Theo Vonk, quien estuvo al cargo de un Burgos a la deriva durante la campaña 92\93, la última para Lito en Primera División. Tuvo más protagonismo que nunca, completando en la categoría un total de 102 partidos y aquel gol frente al Athletic.
Con el Real Burgos descendido, Lito seguiría un año más compitiendo en Segunda División, como también haría con el Toledo, su siguiente destino. En la entidad manchega estuvo tres años y se retiró, en 1997.
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