- El típico jugador que se recuerda de aquellos lejanos años noventa y que salió de la cantera de la Real Sociedad, ese equipo que nos descubrió diversos talentos del fútbol vasco y que fueron dando el salto a la Primera División.
Luis Pérez fue popular en nuestras colecciones a lo largo de toda la década, jugando un buen número de partidos para el equipo donostiarra, con el que además pudo afrontar competiciones europeas.
Fue desapareciendo del fútbol de élite con la llegada del nuevo milenio, que es cuando este atacante optó por marcharse a Pamplona. Jugó para Osasuna en Segunda, pero justo abandonaría el club con el ascenso al primer nivel. Pérez nunca salió de Euskal Herria y terminó su carrera jugando para el Real Unión.
Luis Pérez Pascual nació el 9 de febrero de 1971 en San Sebastián (España), aunque era natural de Hernani, una localidad en la que empezó a jugar al fútbol, con el equipo representativo del municipio guipuzcoano.
Se ganó el apodo de "El Torpedo de Hernani" y demostró sorprendentes cualidades que le llevaron a fichar por la Real Sociedad.
Casi fue coser y cantar colarse en el fútbol profesional. Luis Pérez empezó a despuntar con el Sanse a principios de los noventa, coincidiendo con otros valores Bittor Alkiza, Andoni Imaz y un Imano Alguacil al que hoy en día conocemos como uno de los mejores entrenadores de LaLiga.
Aún estaba Marco Antonio Boronat en el banquillo de Atotxa cuando Luis Pérez logró entrar en las primeras convocatorias. El jugador ya estaba listo para debutar en la categoría máxima del fútbol español.
Figuró en alguna lista de la competición de la Copa del Rey, en la que el canterano de Hernani iba a debutar tiempo después. Antes, Boronat le concedería sus primeros minutos en el campeonato liguero.
El 7 de octubre de 1990, Luis Pérez contaría para el tramo final de una atractiva cita en San Sebastián, en la que se midieron Real Sociedad y el poderoso Real Madrid de un viejo conocido como John Benjamin Toshack. El resultado fue de empate a uno y el debutante tuvo 22 minutos de juego.
- Aunque cumplió al principio como suplente, el de Hernani acabaría ganándose el sitio en el once "txuriurdin", aportando bastante en una Real que se clasificaría para jugar la Copa de la UEFA.
Por su parte, Luis Pérez alcanzó una buena fama en la alta competición española, hasta que fue relegado de nuevo al banquillo con la llegada de Bernd Krauss. En la campaña 98\99, el atacante se quedaría sin lugar en la plantilla de la escuadra donostiarra.
Su participación en la máxima categoría acabó con unos registros de 185 partidos y 24 goles. A partir de entonces, Luis Pérez afrontaría competiciones de menor rango, jugando un par de años en Segunda con Osasuna, para luego finalizar su trayectoria con el Real Unión de Irun.
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