- Durante un par de años, el fútbol español contó con un buen delantero brasileño que había iniciado su carrera en equipos como el Botafogo y Club Atlético Taquaritinga. A principios de los noventa, ficha por el Logroñés.
Al equipo riojano representó durante una temporada, la única que estuvo Gilson en la máxima competición. Dejó algunos goles y se marchó al año siguiente, para probar con un club de Segunda como el Sabadell.
También estuvo un año en la entidad catalana, para después ir completando su trayectoria deportiva con varios equipos brasileños. Jugó para Atlético Mineiro, Rio Preto, Atlético Paranaense, Corinthians, Juventude, São Caetano y Esporte Clube Bahia. Se jubilaría con el Olimpia.
Eso no quiere decir que Gilson fuese un mal futbolista, mas bien al contrario. Este ariete de cabellos rubios tenía un don para el remate, era veloz y oportunista, y siempre hallaba el camino más fácil para desequilibrar.
Contó para nuestras colecciones en un par de campañas, con el C.D. Logroñés. Yo tuve ambos ejemplares de Gilson César Granzotto, que nació el 1 de enero de 1965 en Limeira, Estado de São Paulo (Brasil).
Se sabe que sus inicios fueron con el Botafogo F.C. Debutó como profesional en 1988, aunque no tuvo muchas oportunidades y tuvo que irse al Club Atlético Taquaritinga, con el que ya podría demostrar su puntería de cara al gol.
De sus habilidades se enteraron por Logroño, y Gilson pondría rumbo a España para ponerse a las órdenes de David Vidal, quien ya contaba en su plantilla con otros extranjeros como el uruguayo Nelson Gutiérrez y el guardameta rumano Silviu Lung.
Ya en la primera jornada de Liga, Gilson debutaría para el Logroñés. El 2 de septiembre de 1990, el brasileño sería titular frente al Mallorca, que saldría ganador del estadio de Las Gaunas, por 1-2.
Gilson seguiría sumando apariciones en la Liga Española, en la que ya dejaría su primera diana en la quinta fecha, un tanto valedero para vencer al Burgos en El Plantío, por 1-2. En las siguientes citas, el ariete de Limeira continuaría dejando muestras de su hambre de gol.
- Fueron 6 los goles que Gilson pudo dejar en su única temporada como logroñesista, colaborando así en la lucha por la permanencia, habiendo completado en la máxima división 34 apariciones.
También dejó goles en la Copa del Rey, pero Gilson no continuaría por Las Gaunas. El delantero aceptaría una oferta del Sabadell, equipo que entonces buscaba colarse en la división de oro española.
A Gilson no le veríamos más por la primera categoría, dejando otras 6 dianas para el Sabadell antes de volver a su país. Allá, el atacante paulista completaría su recorrido futbolístico con clubes como Atlético Mineiro, Rio Preto, Atlético Paranaense, Grêmio Esportivo Novorizontino, Corinthians, São Caetano, Juventude, Bahía y Olimpia.
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