- En el Peña Sport de Tafalla concluyó una carrera de casi dos décadas en la que tuvo su mejor momento con Osasuna. Este defensa central empezó a asumir la titularidad cuando su equipo necesitaba volver a Primera.
Con el objetivo cumplido, Ibán Pérez tendría un par de temporadas para presumir de cromo y de competir en lo más alto, ante los Barça, Madrid, Atlético y Athletic de Bilbao. Por desgracia, la fama no le duró mucho.
Abandonaría la disciplina navarra en medio del curso 2001\02 para fichar por el Nàstic, de donde pasó al Real Oviedo para acumular mayor experiencia en la categoría de plata. Después vendrían los años más modestos, pasando por el Reus, Leganés, Ceuta y un Peña Sport donde se retiró.
Ibán Pérez Pascual nació en Pamplona (España), el 19 de octubre de 1974. Desde muy joven perteneció a la factoría de Tajonar, donde se crió junto a otras promesas osasunistas.
Ibán era un defensa central rápido, no muy alto, pero con las condiciones más óptimas para desenvolverse bien en la zona defensiva. A principios de los noventa ya era uno de los juveniles más talentosos de Osasuna.
Haría un papel importante con el filial y Pedro Mari Zabalza le llamaría para ir entrenando con los mayores. El equipo competía en Segunda División, pero las cosas no estaban saliendo como se esperaba por El Sadar.
En el mes de marzo de 1997 se daría a conocer por la categoría de plata, disputando unos cuantos encuentros para ir ganándose el sitio de cara a la campaña 1997\98. Aún le quedaban años en Segunda, e Ibán se ganaría el puesto justo a tiempo, para colaborar en el ascenso al primer nivel.
Fue con Miguel Ángel Lotina al cargo de la escuadra rojilla. El equipo navarro realizaría una buena temporada en pleno cambio de milenio y el resultado final sería el anhelado regreso a la máxima división.
Gracias a ello, Ibán Pérez se presentaría en el alto nivel, contando con la titularidad en la segunda jornada del campeonato 2000\01. En una cita en Barcelona, Osasuna se enfrentaba al R.C.D. Espanyol, al que se pudo derrotar por 1-2 para llevarse a Pamplona los tres positivos.
- En su año de presentación por la élite tuvo bastante participación, mientras que su club celebraría la permanencia en Primera División, categoría en la que el defensa navarro no iba durar tanto como hubiese deseado.
No iba a contar mucho para Lotina de cara al siguiente ejercicio. Ibán Pérez disputaría 6 encuentros con Osasuna, los que serían sus últimos por la alta competición. En el mercado de invierno se iría al Gimnàstic de Tarragona.
La temporada acabaría con el descenso a Segunda B, e Ibán Pérez se iría al Oviedo para vivir más de lo mismo en el curso 2002\03. Abandonaría la entidad asturiana para recalar en el Ceuta, y luego jugaría para otros clubes como el Leganés y Reus Deportiu. Su carrera terminaría en Tafalla.
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