- Siempre vistió de rojo, aunque un día se vio obligado a abandonar el club de su tierra, donde Palacios vivió muchas experiencias. A mediados de los noventa dio el salto al primer equipo, jugando para un Osasuna que entonces se hallaba en Segunda División, en la que este defensa cogió experiencia.
Con la llegada del nuevo milenio veríamos al equipo navarro de nuevo por el máximo nivel. Como uno de los capitanes del equipo, Palacios pasaría otros cuatro años disfrutando de buenos momentos como osasunista.
Casi se lleva la Copa del Rey poco antes de irse de la ciudad, ya que su carrera terminaría jugando para el C.D. Numancia. Pasó varios años en la entidad soriana, para la que también compitió en el primer nivel.
Podía jugar como centrocampista, pero este jugador era más eficaz como defensa central, o así le vi mejor yo en sus actuaciones sobre el verde. Líder de vestuario, actuaba siempre con contundencia y mucho trabajo.
Si queréis saber más sobre César Palcios pinchad sobre su nombre. Aquí repasaremos breves detalles, empezando por decir que nació en Pamplona (España), el 19 de octubre de 1974.
Jugador de la casa, Palacios se crió en la contera de Tajonar desde 1987. Entonces jugaría para las secciones menores de Osasuna, hasta llegar al Promesas en 1993. Disputaría sus primeros encuentros en la Segunda B, aunque el futuro le deparaba retos más ambiciosos con el equipo profesional.
Fue Enrique Martín quien confiaría en sus habilidades en una campaña realmente complicada. Con Osasuna amenazado por el descenso, el zaguero tendría su presentación en la categoría máxima.
El 6 de abril de 1994, César debutaría en un partido en casa frente al C.D. Tenerife. Fue un arranque esperanzador con el conjunto "rojillo" logrando una victoria por 1-0. Dos jornadas después, el canterano anotaría su primer gol, en un choque ante el Rayo Vallecano.
Palacios dejaría muy buenas actuaciones en aquel corto tramo de participación por el máximo nivel, en el que El Sadar acabaría llorando el descenso a la categoría de plata. Poco a poco, el defensor se asentaría en la primera plantilla.
- Seis años que fueron muy duros para recuperar la categoría. Al final, el equipo pamplonica celebraría su vuelta a Primera en el año 2000, y César Palacios lo festejaría lanzando el "Txupinazo" en San Fermín.
Tocaba el momento de disfrutar unos cuantos años de la élite, con un Osasuna que llegó lejos en la Copa del Rey del curso 2002\03, aunque en semifinales caería contra el Recreativo de Huelva.
Un par de años más seguiría en Primera como osasunista, más lo que iba a disfrutar con el Numancia. Para el club soriano jugaría otros seis años, dos de ellos en la categoría de oro, en la que cerró unos registros de 130 partidos y 4 tantos. Por Los Pajaritos despediría su carrera, en 2010.
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