- Seguramente, muchos aficionados de las más recientes generaciones conozcan mejor la carrera de Balta como entrenador, pero éste también llegó a posar para los cromos en su trayectoria como futbolista.
Es el típico jugador de club, ya que este salmantino solamente representó a la U.D. Salamanca a lo largo de su vida deportiva, aunque nunca pudo debutar en Primera División. Parece que esa suerte le esquivó.
Tuvo sus mejores opciones compitiendo en Segunda y Segunda B, pasando doce temporadas en un Salamanca con el que terminó su carrera celebrando un ascenso al máximo nivel. Años después, Balta aparecería como entrenador del equipo, e incluso debutaría en Primera en su nueva labor.
Por desgracia, tuvo que hacerse cargo del conjunto "charro" en plena crisis deportiva y económica, siendo testigo directo de una triste desaparición en 2013. También entrenó a equipos como el Zamora C.F. y Palencia C.F.
Hablemos también de sus cromos. Baltasar Sánchez Martín fue conocido en las colecciones como "Balta", y así le mencionarían sobre el terreno de juego. Tuvo su primer adhesivo en Super Rollan (1983\84), y reapareció en nuestros álbumes con el ascenso del Salamanca, en una tirada de Segunda División y una obra de Panini en la temporada 1995\96.
Balta nació en Salamanca (España), el 9 de mayo de 1962. Supongo que jugaría en equipos escolares y en clubes locales antes de llegar a la U.D. Salamanca, ese club que le marcaría toda su carrera en el grado profesional.
El club salmantino se hallaba en Primera cuando Balta ya era una promesa del cuadro filial, un jugador de zaga que empezaría a entrenar con los mayores, que por entonces estaban en manos de Manolo Villanova.
Aunque no tuvo la opción de debutar en la alta división o en Copa del Rey, el defensor sí contaría con la suerte de debutar profesionalmente, en la Copa de la Liga. El 13 de mayo de 1984, Balta completaría un partido en casa contra el Real Mallorca, y el duelo finalizó con empate a unos.
Aquella campaña no acabaría bien, puesto que el Salamanca descendería a Segunda y mucho tardaría en dejarse ver por la alta competición. A partir de entonces, el canterano iría contando con más posibilidades.
En otra temporada decepcionante, poca culpa tendría el zaguero del descenso a la Segunda B, ya que pocas veces se le pudo ver sobre el terreno de juego. Ya con el equipo "charro" en la categoría de bronce, Balta empezaría a ser más importante, cumpliendo con muchas titularidades hasta el ejercicio 87\88, que fue cuando se consiguió volver al segundo nivel.
- Ya más experimentado, el jugador ejercería como uno de los capitanes del vestuario. Se soñaba con volver a Primera, pero el Salamanca volvería al tercer nivel a principios de los noventa.
Durante el tramo final de su trayectoria deportiva, esta leyenda unionista continuó siendo importante, aunque las lesiones empezarían a hacer mella y poco se le pudo ver en el año del regreso a Segunda (1994).
Se avecinaban buenos tiempos, pero el veterano defensor salmantino cumpliría con sus últimas actuaciones sobre el verde. Ayudó al club de su ciudad en su intentona por retornar al máximo nivel, el sueño imposible de Balta, que nunca llegaría a competir en el mismo.
Finalizaría su carrera jugando únicamente para el club de El Helmántico, para el que intervino en un total de 317 partidos, en los que hizo 26 goles. Poco después, Balta iniciaría su nueva etapa como entrenador.
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