- Ya no se ven tantos futbolistas rumanos como otrora. Iulian Filipescu fue uno de los muchos que tuvimos por nuestra Liga, un técnico defensor que salió del Steaua de Bucarest para probar en Turquía con el Galatasaray.
Después de dos temporadas con el equipo de Estambul, Filipescu ficha por el Real Betis Balompié. Cuatro temporadas estuvo en la entidad verdiblanca, aunque una de ellas fue compitiendo en Segunda División, con rápido ascenso.
Dejó el equipo sevillano cuando ya competía por la Copa de la UEFA, aún en la mejor edad para seguir en el fútbol. El internacional rumano se marcharía a la liga suiza, donde representaría al F.C. Zürich. Su último año lo vivió en la Bundesliga, jugando para el MSV Duisburg.
- Algún cromo llegué a tener de este polivalente defensa rumano, capaz de actuar como defensa central o por las dos bandas de lateral. A la selección nacional de Rumanía representó desde la categoría Sub-21.
Iulian Sebastian Filipescu nació el 29 de marzo de 1974 en Slatina (Rumanía). En el Faur de Bucarest tuvo los pasos iniciales, permaneciendo en el club hasta 1992, cuando fichó por el Steaua.
Iulian Sebastian Filipescu nació el 29 de marzo de 1974 en Slatina (Rumanía). En el Faur de Bucarest tuvo los pasos iniciales, permaneciendo en el club hasta 1992, cuando fichó por el Steaua.
Pronto se convertiría en uno de los mejores futbolistas balcánicos, brillando en sus cuatro años en la entidad de la capital, ganando diversos títulos antes de salir del país para probar por el extranjero, ya que se trasladaría a Turquía para unirse al Galatasaray.
También por la liga turca celebraría algunos títulos, gozando ya de un buen cartel internacional que le llevaría a ser pretendido por clubes de mejores ligas europeas. Al final, y tras dos temporadas en el Galatasaray, Filipescu viajaría a España para fichar por el Real Betis.
Al mando del equipo sevillano estaba Javier Clemente, el técnico que nos lo iba a presentar en la Liga Española. Pero antes tendría su estreno en la Copa del Rey, en un partido contra el Mallorca en el que se perdería por 0-1 en Benito Villamarín. Con el resultado de la vuelta, el Betis se iría a la calle.
Tres días después, el 23 de enero de 1999, el defensa rumano sería titular en San Mamés, ante el Athletic de Bilbao. Esta vez, su equipo sacaría un empate frente al conjunto vasco. No hubo goles en ese partido.
Sí hubo goles en la siguiente fecha, el que hizo Filipescu para estrenarse en la competición española. Gracias a ese tanto, el equipo verdiblanco lograría una importante victoria como local frente al Deportivo Alavés (1-0).
- Dejó muy buena impresión en su primera media temporada como bético, pero las cosas se torcieron al año siguiente, cuando el equipo descendió a Segunda División. Por suerte, se recuperó pronto la categoría.
El zaguero rumano seguiría año y medio más en la entidad de Heliópolis, ayudando en la clasificación para la Copa de la UEFA. En el mercado invernal del ejercicio 2002\03, Filipescu se marchó a la liga suiza.
En la Liga Española terminó con 93 partidos y 6 goles, y todavía siguió a muy buen nivel en su etapa como miembro del F.C. Zürich, en el que estuvo un par de temporadas. En Alemania finalizaría su actividad deportiva, compitiendo en la Bundesliga con el MSV Duisburg.
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