- Seguro que muchos de mi quinta recuerdan a la gran referencia de ataque de un Compostela de Primera. Marcó una época por San Lázaro, donde fue un auténtico ídolo que había aterrizado en España para triunfar con el Real Madrid.
Se suele decir que "a falta de pan, buenas son tortas", y eso debió pensar este nigeriano que en tierras gallegas pudo disfrutar del fútbol como en ningún sitio. Además, Nusa Ohen dejo muchos goles para el club santiagués.
Tras un breve paso por Turquía volvería a la capital gallega, pero entonces ya se vivían tiempos más revueltos. Luego pasaría también por el Leganés, aunque no tardaría mucho en regresar a su país para concluir su carrera deportiva.
- Christopher Nusa Ohenhen (abreviado Ohen), nació el 14 de octubre de 1970 en Benin City (Nigeria). Allí iniciaría su carrera con el Bridge F.C., un club de Lagos con el que destacaría como el gran goleador que era.
Su gran oportunidad para que le descubrieran otros clubes sería el Mundial juvenil de 1989, en el que el atacante nigeriano tuvo un espectacular rendimiento que provocaría el interés de los ojeadores del Real Madrid. Por ende, Ohen aterrizaría en España a finales de los ochenta.
En el filial merengue coincidiría con los Santi Cañizares, Marcel Sabou, Mutiu e Ismael Urzáiz, jugadores que como él, iban a tener sus años de buen fútbol por la categoría máxima. Por desgracia, el nigeriano no tendría mucho que hacer por la capital y haría las maletas sin llegar a jugar para el primer equipo del Real Madrid.
Santiago de Compostela sería el lugar donde no le iban a faltar oportunidades para triunfar. Ohen llegaría a un equipo de segundo nivel donde pronto iba a ser la estrella, contando con la confianza del técnico Fernando Castro Santos.
Ohen no tardaría en ponerse las pilas para celebrar sus primeros goles, pasando a ser la referencia atacante de un "Compos" que alcanzaría su histórico ascenso a Primera en 1994.
A mediados de aquellos años noventa, abríamos los sobres y nos encontrábamos con el cromo de un todavía desconocido Ohen, un hombre que pronto se iba a ganar la admiración de todo gustoso por el fútbol.
Ya en su primer año por la alta categoría, Nusa marcaría 14 dianas para sorpresa de todos, mientras que su equipo lograría la permanencia. El delantero nigeriano seguiría marcando goles de todos los colores, aún llegando a contar con la competencia de otros buenos arietes como Lubo Penev o Bent Christensen.
- Cuatro años le duraría la alegría por el fútbol de primer nivel, llegando a dejar 48 tantos en 117 partidos, una cifra que estaba a la altura de los más grandes delanteros de su época.
Y aclaro el tiempo que se mantuvo aquella alegría, porque el "Compos" acabaría descendiendo a Segunda División en 1998. El nigeriano acabaría abandonando Santiago para fichar por el Besiktas turco, donde estaría una temporada.
Regresaría a San Lázaro y aportaría un par de dianas más para evitar la catástrofe del equipo gallego, que a partir de entonces iría sin remedio a la deriva. Nusa Ohen se marcharía y probaría también con el Leganés, para luego retornar a su país, donde finalizó su carrera.
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