- Heredé algunos cromos en mi niñez, auténticos tesoros de los que jamás sabré su paradero. Sé que un día estuvieron escondidos en mis cajas redondas de latón. Tenía unas siete u ocho de aquellas míticas pastas danesas.
El caso es que me vino a la memoria la imagen de Carlos José Báez, un delantero paraguayo al que ni vi jugar, aunque fui constancia de su paso por la Liga Española de todos los relatos históricos que he ido leyendo.
Llegó a España procedente del Cerro Porteño para fichar por la U.D. Salamanca, un club al que dedicó varios años de su carrera, interrumpidos por una breve cesión al Burgos C.F. Con el descenso del club salmantino, Báez se marcharía a Portugal, donde presumiblemente se retiró con el Nacional.
Su nombre completo es Carlos José Báez Vargas, y nació el 1 de noviembre de 1953 en Asunción (Paraguay). Se supone que inició su carrera en el Cerro Porteño, con el que se dio a conocer como un delantero goleador de poderosa zancada que debutó como profesional en 1973.
Se comenta que triunfó con el club del Barrio Obrero, por lo que pronto debutaría para la selección nacional paraguaya, a la que representó en 21 ocasiones y dedicó 5 goles. El eco de su calidad traspasaría fronteras.
En Salamanca mostrarían mucho interés por Báez, quien aterrizó en sueño español para formar parte de una plantilla en la que se hallaban destacados futbolistas como Jorge D´Alessandro, Bustillo, José Albaladejo, Ricardo Rezza y el mediocampista portugués João Alves.
Debutaría en la Liga Española a las órdenes de José Luis García Traid, el 4 de septiembre de 1977. En El Helmántico, el equipo "charro" recibía la visita del Real Madrid, al que consiguieron vencer por 3-1.
Hubo sorpresa en aquella jornada, así como también la habría en la fecha siguiente, que es cuando Báez se estrenó como goleador de Primera por partida doble. Aquellos dos goles del paraguayo valdrían para vencer al Burgos en El Plantío (0-2). Aquel inicio de campaña fue ilusionante.
No estuvo mal la campaña realizada por los de García Traid. En la tabla clasificatoria se ocupó un noveno lugar, mientras que Carlos Báez dejaría sus mejores registros de cara a la portería, con 6 tantos en 34 partidos.
Báez continuaría representando a aquel gran Salamanca que dio mucha guerra por Primera División y el punta paraguayo hizo otros 3 tantos en la campaña siguiente, ya con Felipe Mesones en el banquillo. De cara al curso siguiente se produciría un inesperado giro de guión, y el jugador se marcharía prestado al Burgos C.F., que también se hallaba en la misma categoría.
- Carlos Báez no contaba para Mesones y eso le obligó a quedarse fuera de las colecciones durante aquel curso 79\80. De hecho, el que observamos -con cara A y B-, fue uno de los últimos que se pudieron comprar.
En cuanto a su paso por el Burgos, el atacante paraguayo pudo dejar un gol más de su paso por la Liga Española, en la que iba a volver a competir como miembro del Salamanca por última vez.
Aquella campaña 80\81 fue algo triste para los aficionados "charros". Pese a que Báez demostró puntería en las escasas actuaciones que tuvo con el Salamanca, no habría forma de eludir el descenso a Segunda División.
La aventura de Báez por el primer nivel concluiría con 13 goles en 99 encuentros, y aún tendría la posibilidad de jugar por última vez para el conjunto salmantino, aunque en la división de plata. El de Asunción se marcharía para Portugal, donde jugaría para el Nacional de Madeira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario