- Otro cromo calvito de nuestras colecciones de antaño. Este delantero croata empezó jugando para el Hajduk Split y se fue a Alemania para unirse al Eintracht de Frankfurt, donde estuvo una temporada.
Mornar acabaría probando también en la Liga Española, ya que se incorporó al Sevilla F.C. Aportó algún que otro gol en una triste campaña que terminó con descenso a Segunda División, y luego se fue al C.D. Ourense.
Poco más pudo demostrar por el fútbol español, así que partió a Bélgica para jugar en el Standard de Lieja. Allí representó también al Anderlecht durante unos años y compitió también en la Premier con el Portsmouth. En la liga francesa terminó jugando para el Rennes.
Ivica Mornar nació el 12 de enero de 1974 en Split (Croacia). Debutó como profesional cuando el país ya estaba en guerra, y aún tuvo que aguantar los años más duros, hasta que en 1995 se fue a Alemania.
Lo dejó todo para fichar por el Eintracht de Frankfurt, con el que conoció la Bundesliga en el curso 95\96. El crota solamente aportaría 2 goles, aunque también es cierto que jugó media temporada para la entidad de Hesse.
Mornar acabaría en España una vez terminada aquella campaña. Con José Antonio Camacho se iba a presentar en la división de oro española, y mucho se esperaba del ariete de Split por la capital hispalense.
En la primera jornada del campeonato ya iba a tener la titularidad, el primer día de septiembre de 1996. En San Sebastián, el equipo andaluz se iba a medir a la Real Sociedad, que se iba a mostrar muy seria ante su afición. La escuadra vasca acabaría ganando por 1-0.
En la jornada siguiente, Mornar conseguiría hacer su primer gol, aunque no iba a servir para mucho. Esta vez, el Sevilla perdería en su feudo contra el Real Zaragoza, por 1-2. El delantero balcánico podría dejar otro tanto como sevillista, ante el Celta de Vigo en Balaídos.
Coincidió con sus compatriotas Robert Prosinecki y Josko Jelicic en su breve estancia por el Sánchez Pizjuán, ya que Mornar no pasaría más de un año como sevillista, y tampoco ayudaría la situación del club.
- El croata dejó de recuerdo aquellos 2 tantos en 11 partidos, y este cómico adhesivo con el Sevilla, en el que apreciamos una mala labor de Photoshop. En vez de Mornar, parece el árbitro Pablo González Fuertes.
El Sevilla descendió a Segunda y el balcánico abandonaría la disciplina andaluza para recalar en el C.D. Ourense. Con este equipo competiría en Segunda, dejando 8 tantos como despedida del fútbol español.
Decidió irse al fútbol belga, donde representó a dos grandes como el Standard de Lieja y Anderlecht. Con ambos desempeñó un gran papel antes de irse a Inglaterra, donde jugaría para el Portsmouth en la Premier League. Antes de retirarse pasaría por Francia, y allí representó al Rennes.
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