- Con el equipo de su ciudad consiguió tener unos inicios sorprendentes, ganándose un sitio en la selección nacional y compitiendo a muy buen nivel desde que debutó en la categoría de plata.
El Oviedo acabaría subiendo a Primera y Luis Manuel se convertiría en un cromo muy popular para nuestros desgastados álbumes. Hasta mediados de los noventa, se mantuvo en la entidad de Carlos Tartiere.
Pero el Oviedo no fue el único club con el que pudo concursar en el máximo nivel. Tres temporadas pasaría en el Salamanca, dos de ellas fue en Primera División, con su descenso y ascenso. Ya a finales de los noventa, el defensor asturiano se iría al Toledo, después a la Ponferradina y al Águilas.
Luis Manuel Arias Vega nació el 29 de marzo de 1967 en Oviedo (España). Desde muy joven formó parte de las categorías menores del Real Oviedo, llegando al filial directo a mediados de los ochenta.
El primer equipo se hallaba entonces en Segunda División, de la mano del técnico José Luis Romero. Éste convocaría al canterano en algún partido que otro de aquella campaña 84\85 que terminó con la conquista de la Copa de la Liga.
Poco a Poco, Luis Manuel iría entrando en los planes del entrenador, quien dejaría su sitio a un Vicente Miera que daría más oportunidades al joven central, ya en la temporada en la que el Oviedo consiguió el ascenso.
En 1988, el club asturiano iba a volver a competir en la categoría máxima, en la que Luis Manuel debutaría un 3 de septiembre. En casa y contra la Real Sociedad, el zaguero sería titular y ayudaría a obtener una victoria por 1-0.
Miera le haría titular en ese año tan especial. Su equipo conseguiría mantener la categoría, como también se haría con Javier Irureta. Solo las lesiones harían que el defensa ovetense se cayera de la titularidad, figurando como una de las mayores sorpresas de la "Liga de las Estrellas".
Luis Manuel sería estampa del club de su tierra durante varias temporadas, junto a otros buenos oviedistas como Berto, Carlos Muñoz, Nikola Jerkan y su compañero de zaga Antonio Gorriarán. Así transcurrirían siete buenos años como miembro del club asturiano.
- Aún le quedaba algo por decir en el fútbol, así que abandonó su ciudad para seguir compitiendo en el alto nivel con la U.D. Salamanca, club para el que jugaría a partir de la temporada 1995\96.
Luis Manuel entró en la fase decadente de su carrera deportiva, jugando muy pocos partidos en un año que acabaría en descenso. Al año siguiente se recuperaría la categoría, en su último año como jugador "charro".
Pero el defensa astur solo tuvo apariciones en la Copa del Rey, cesando su actividad en Primera con un total de 195 partidos. Después jugaría un par de años en Segunda con el C.D. Toledo, de donde se fue a la Ponferradina, de Segunda B. La carrera de Luis Manuel acabaría en el Águilas C.F.
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