- Confusión creaba su nombre al ser muy similar al de uno de los mejores poetas españoles que hubo, pero éste no es Machado, sino Manchado. Jugaba como centrocampista y pasó gran parte de su carrera en el Castellón.
En las filas menores de este club empezó a crearse como futbolista, hasta que logró profesionalizarse y fue adquiriendo experiencia para colaborar en el ascenso del equipo blanquinegro, y así se presentó en Primera.
Muchos fueron los años que jugó para el Castellón, al que incluso llegaría a entrenar. Pero Manchado también jugó para otros clubes como el Palamós y Hércules, retornando a Castalia para finalizar una carrera profesional que se extendió hasta tener poco más de treinta años.
Le recuerdo como un medio de contención, un hombre de fortaleza e inteligentes movimientos. Aunque empezó en el equipo castellonense, Manchado nació en Sabadell (España), el 28 de abril de 1965.
Desde muy joven fue formándose en el club "orellut", al que ascendería para la campaña 83\84. Debutaría en la Copa de la Liga de Segunda, competición que ganaría precisamente su equipo.
Lo que es en la competición liguera no debutaría hasta el año siguiente, aún con Antonio Torres de entrenador. Mala suerte que el técnico ilerdense sería despedido, y pocas opciones tendría Manchado con Antal Dunai al mando de los castellonenses. De hecho, no jugó ni un minuto con el húngaro.
Al final, el centrocampista catalán conseguiría la titularidad, justo para disfrutar del gran momento del club blanquinegro. Al término de la campaña 88\89, Castalia celebraría el ansiado ascenso a Primera División.
Manchado se estrenaría en la máxima división el 3 de septiembre de 1989. En el Carlos Tartiere, el Castellón se enfrentaría al Real Oviedo, en una jornada inaugural que se terminaría con reparto de puntos (1-1). Antonio entró desde el banquillo y jugó poco más de un cuarto de hora.
Muchos recordamos algunos de los cromos de aquel equipo que efímeramente pasó por el primer nivel: Emilio Insierte, Ximet, José Hurtado, Pelletti, Luis Mario Cabrera y el centrocampista Antonio Manchado.
- En su primera campaña entre los grandes, el Castellón conseguiría la permanencia y Manchado jugaría casi todos los partidos, algo que se pudo mantener de cara a la temporada 1990\91.
Pero Luiche no conseguiría un buen inicio de campaña, un rumbo que ni Lucien Muller supo enderezar. De modo que las cosas se complicarían para los "orelluts" y la temporada terminaría en descenso.
Antonio Manchado ya no volvería a jugar en Primera División, se mantuvo un año más en el equipo y luego pasaría por Palamós y Hércules. El centrocampista catalán volvería al Castellón en 1995, pero el equipo se hallaba en Segunda B. En esta categoría jugaría sus últimos partidos.
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