- Hizo sus primeros goles por la división de oro como rayista, aunque su carrera empezó en su Girona natal. Manolo Valle paso de jugar en Olot a verse con el Rayo Vallecano dando los pasos iniciales por el primer nivel.
Fue una alegría efímera, ya que se descendió. El delantero catalán seguiría un año más por Vallecas y sería acogido en las canteras de los gigantes de la Liga Española: Real Madrid y Barça. Posteriormente ficharía por el Cádiz C.F., con el que volvió a la élite.
Con el equipo gaditano dio sus últimos pasos por la categoría máxima, para después jugar en el Figueres un par de campañas. Antes de colgar las botas, Manolo jugaría para otros clubes como Palamós y Real Jaén.
No he localizado ningún cromo suyo con el Rayo Vallecano, aunque sí podemos contemplar un par de ejemplares de la temporada 83\84, cuando militaba en el Cádiz. Abajo vemos el ejemplo de como se trataba de mejorar la estampa, así que este delantero tuvo dos cromos en aquella campaña.
Manel Valle Estefanell fue más conocido en aquellos cromos como "Manolo", a veces acompañado por su primer apellido. El 6 de julio de 1968 nació en la localidad de San Hilario Sacalm, Girona (España).
Y empezó jugando para el Girona F.C., con el que estuvo compitiendo en la Segunda División B. Tuvo un breve paso por el modesto Unió Esportiva Olot, aunque a finales de los setenta contaría con la opción de unirse al Rayo Vallecano, que entonces estaba para debutar en Primera.
Al mando de los amarillos estaba el uruguayo Héctor Núñez, quien contó en su plantilla con algunos compatriotas y la presencia de los Miguel Uceda, Rocamora, Marián, Robles, Tanco y Alvarito.
El 14 de octubre de 1979, Manolo debutaría en Primera con el equipo madrileño. En el Rico Pérez, el atacante sería titular, aunque no dejaría goles en un buen partido contra el Hércules, al que se le sacó un punto (1-1).
Su primer tanto como rayista sería en la Copa del Rey, ante el C.D. Manchego. En esta competición se desataría como el punta de referencia del equipo, hasta que logró ver puerta cuando la temporada llegaba a su fin. Por desgracia, el equipo de la franja bajaría a Segunda División.
Así concluiría su primera etapa por el nivel superior. Manolo seguiría jugando para el Rayo durante una temporada más, pero su rendimiento dejó mucho que desear. Por ende, el punta gironí se marcharía de Vallecas.
Manolo se quedaría en la capital y jugaría para el filial del Real Madrid. En el Castilla aún quedaban jugadores de aquellos que llegaron a la final de la Copa de 1980, y el catalán estuvo a la sombra de delanteros como Francesc Julià o Paco, jugando escasos partidos.
Después de su paso por el club blanco vendría su etapa como blaugrana, pero también con representación en su filial. El ariete tampoco pudo destacar con el Barcelona Atlètic en la categoría de plata.
- Pero Manolo tendría una segunda oportunidad para competir por la élite, y ello fue posible gracias a su fichaje por el Cádiz C.F. Con Dragoljub Milosevic tendría casi todas sus oportunidades, empezando por la Copa.
Sería también un año complicado para la disciplina gaditana, así que Manolo tampoco tendría muchas oportunidades para demostrar su talento, y menos teniendo por delante a Salvador Mejías y el magnífico y figura Mágico González. Para el Cádiz solamente pudo ver puerta en Copa.
La temporada acabaría con el descenso del equipo amarillo y Manolo ya no seguiría más en la entidad andaluza, habiendo terminado su pequeña aventura en Primera con unos registros de 1 gol en 18 partidos.
A Manolo solo le quedaba seguir jugando al fútbol por niveles menores, pasando dos temporadas en un Figueres con el que estuvo compitiendo en el segundo nivel. Después vendría el tramo final por la Segunda B, en la que el catalán jugaría para Palamós y Real Jaén.
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