¿Te acuerdas de Sergey Shustikov?

- Hay cromos que pasan al olvido y otros que nos abandonan en persona, como ocurrió con Sergey Shustikov, fallecido en 2016 a causa de un infarto y cuando solamente tenía 46 años de edad.

Que sirva de homenaje este artículo que nos recuerda que un día pasó por nuestra Liga Española, como miembro del Racing de Santander. Al equipo cántabro llegó en 1996, procedente del Torpedo de Moscú. 

Jugó 46 partidos en nuestra competición y dejó un gol, para luego fichar por Osasuna, donde no llegó a debutar. Habiendo jugado también para el CSKA de Moscú, Shustikov completaría su trayectoria con el F.C. Moscú, y ahí colgó sus botas para después iniciarse como entrenador.

- En su familia el fútbol es una tradición, ya que su padre fue un destacado futbolista del Torpedo, equipo en que años más tarde jugaría su hijo, que también se llama Sergey.

El nombre completo es Sergey Viktorovich Shustikov (Сергей Викторович Шустиков), y nació el 30 de septiembre de 1970 en Moscú (Rusia), antiguamente Unión Soviética. 

Llegó a jugar para la momentánea selección de la CEI, mientras se fue separando la URSS. Su puesto era el de defensor, capaz de realizar labores de centrocampista, siempre pendiente de la parcela defensiva. A finales de los ochenta, se da a conocer con el Torpedo de Moscú. 

Destacó como uno de los mejores futbolistas en su país, permaneciendo en la entidad moscovita hasta el verano de 1996, que es el momento en el que el jugador se lanzó a probar por la Liga Española.

El Racing de Santander ya se había acostumbrado a incorporar en sus filas jugadores rusos. De hecho, en plantilla ya se hallaban Dmitri Ulianov, Ilshat Fayzulin y el delantero Vladimir Beschastnykh. 

Ya desde inicio, Shustikov sería uno de los elegidos para ser titular con Marcos Alonso de entrenador, el que le hizo debutar en nuestra competición. El primer día de septiembre de 1996, el equipo santanderino recibiría en casa la Valencia, al que derrotaron por un resultado de 3-2.

Shustikov seguiría cumpliendo con apariciones en nuestra liga, pero la mala forma física y la adaptación le harían perder esa continuidad y acabaría marchándose cedido de vuelta a su país, como fichaje del CSKA. Con este equipo completaría la temporada 1997\98.

- Ofrecería un mejor rendimiento al año siguiente, con Nando Yosu empezando la temporada 98\99. Fue entonces cuando se vio la buena versión de Shustikov, que no fue acorde al rendimiento del equipo cántabro.

Se estrenaría como goleador de Primera en un partido frente al Salamanca y completaría con el Racing 46 apariciones, finalizando su último año por El Sardinero con el festejo de otra permanencia en la división de oro. 

Estaba previsto que siguiese en el Racing para el ejercicio 1999\00, e incluso tuvo otro cromo a coleccionar. Al final, el defensor ruso ficharía por C.A. Osasuna, con el que nunca llegaría a sumar partidos. Ya lejos de España, Shustikov finalizaría su trayectoria con el F.C. Moscú. 

¿Te acuerdas de Rubén González?

- Como el anterior futbolista, Rubén González también probó por el fútbol azerí, y además estuvo en otras ligas extranjeras. Pero a este defensor le conocimos como una de las grandes víctimas de los "Zidanes y Pavones".

Y es que en el Real Madrid consiguió debutar como profesional tras formarse en las categorías menores. La falta de oportunidades le llevó a probar por Alemania con el Borussia Mönchengladbach, para luego unirse al Albacete. 

Por varias categorías representó a otros clubes como el Real Zaragoza, Racing de Santander, Celta, Real Mallorca, Osasuna y Coruxo. En su interminable carrera también jugó por Azerbaiyán con el F.C. Baku y hasta se atrevió por la India con el Odisha F.C. Rubén se retiró con el Coruxo F.C.

- Rubén González Rocha fue un defensa central, internacional por las categorías menores de España, que llegó a completar en Primera unos registros de 118 partidos y 5 goles.

Me faltó su cromo con el Celta, pero es que el equipo de mi tierra competía entonces en Segunda, y tampoco tuve mucho interés por coleccionar, ocupado con cosas más importantes.

Y de esa misma tierra es Rubén, que nació el 29 de enero de 1982 en Santiago de Compostela, Galicia (España). Con equipos como el Conxo o las secciones menores de la S.D. Compostela, este zaguero inició su carrera deportiva. A finales de los noventa llegaría a Madrid. 

El santiagués fue recibiendo formación en las categorías menores del Real Madrid C.F., teniendo ya sus primeras convocatorias con el primer equipo a las órdenes de Vicente del Bosque. Aunque se sentó en el banquillo a lo largo del ejercicio 2000\01, el debut oficial tuvo que esperar.

En el año de la celebración de la Champions, Rubén conseguiría debutar en Primera División. Curiosamente lo haría en su Galicia natal, en un partido frente al Deportivo de La Coruña en Riazor. El defensor completaría los noventa minutos, aunque el Madrid perdería por 3-0. 

En aquellos años de pertenencia al club blanco, Rubén tuvo más apariciones, pero no habría forma de ganarse el sitio ante la competencia de grandes jugadores. Hablamos de la "Era Galáctica" del Real Madrid.

Rubén tuvo que dejar la entidad de Chamartín para probar suerte en otros clubes, en los que halló más posibilidades. Tras una breve experiencia en la Bundesliga con el Borussia Mönchengladbach, ficharía por el Albacete.

- Con el descenso del club manchego, Rubén volvería al Castilla, desvinculándose del Real Madrid para continuar en Primera con el Racing de Santander, en el que estuvo una temporada antes de fichar por el R.C. Celta.

Para el equipo vigués compitió en Segunda, y no le fue nada bien. Al zaguero gallego le saldrían otras ofertas, y aprovecharía para estampar su firma con el Mallorca, para así volver a la élite de cara al curso 2009\10.

Su último club de Primera fue Osasuna, abandonando Pamplona para probar en Azerbaiyán con el Baku. También lo intentó en el fútbol hindú, donde representó al Odisha. Rubén jugó dos años para un Zaragoza de Segunda y volvió a su tierra natal para retirarse con el Coruxo F.C.

¿Te acuerdas de Mikel Dañobeitia?

- Pasemos a una de las primeras páginas del álbum para pegar el cromo de Dañobeitia, un ejemplar que llegó a mis manos por casualidad, en ese típico momento en el que te da por comprar un par de sobres de cromos.

Y eso que muchos no pudimos coleccionar de este atacante zurdo, ya que solamente le vimos un par de años en Primera con el Athletic Club. También hubo colecciones de Segunda División, pero no tuve ni un ejemplar.

Empezó en el Baskonia y pasó por el Sestao River, y de ahí al Athletic. Dos temporadas compitió por el máximo nivel, para luego afrontar dos campañas en el Salamanca, del segundo nivel. En esta categoría también representó al Córdoba, jugando después para Logroñés, Barakaldo y Portugalete. 

- Mikel Dañobeitia Martín nació el 5 de marzo de 1986 en Barakaldo, en la margen izquierda vizcaína (España). Pronto entraría en las categorías menores del Athletic de Bilbao, para luego seguir formándose con el Baskonia. 

Como un extremo izquierdo de buen pie, este jugador fue prosperando en su carrera con el Sestao River, con el que vivió sus primeros duelos de la Segunda B española. 

Al veloz atacante vizcaíno se le empezó a conocer como "Cohete", retornando a Lezama para seguir su camino con el filial del Athletic, empezando a destacar en la campaña 2005\06. Así se ganó sus opciones como profesional. 

Poco le quedaba en el banquillo de San Mamés a José Luis Mendilibar, el técnico que le iba a conceder sus primeros minutos oficiales con el Athletic. Aquel sería el año de su eclosión deportiva. 

El 26 de octubre de 2005, Mikel Dañobeitia conseguiría presentarse en Primera División. Mendilibar le concedería la titularidad al medio baracaldés, para un encuentro que se celebraría en El Sadar contra Osasuna. El enfrentamiento terminó con 3-2 para los "rojillos".

A partir de entonces, Dañobeitia seguiría en el primer equipo, y eso que habría cambio de entrenador con la llegada de Javier Clemente. Con su paisano debutaría en Copa y, poco después, dejaría su primer tanto en Liga, en una victoria en "La Catedral" frente al Real Betis (2-0).

En su primera campaña como profesional, el baracaldés cumplió con bastantes apariciones, aunque nunca pudo llegar a competir en Europa, salvo en un choque de la Copa Intertoto frente al Ecomax Cluj.

- Con Félix Sarriugarte de entrenador, Dañobeitia seguiría entrando en dinámica del primer equipo, aunque aquella temporada 2006\07 no iba a ser buena para el jugador, que apenas tuvo participación.

Poco más iba a poder hacer por la máxima competición, en la que disputó 26 partidos para dejar aquel tanto contra el Betis. El atacante baracaldés dejaría el Athletic por falta de opciones, para recalar en la U.D. Salamanca. 

Así de breve fue la experiencia por la élite, jugando unos años más por el segundo nivel con el Córdoba C.F. El resto de su carrera se desarrollaría de forma amateur, pasando por la U.D. Logroñés, Barakaldo C.F. y Club Portugalete. En 2016 finalizaría su labor deportiva con la S.D. Balmaseda.

¿Te acuerdas de Mario Rosas?

- Futbolista con un amplio recorrido pero con poca participación en Primera División. Mario Rosas debutó en esta categoría con el F.C. Barcelona, club iniciador con el que tuvo escasas apariciones antes de irse al Deportivo Alavés.

Con el equipo vasco dejó de competir en el alto nivel, siendo cedido al Salamanca y abandonando Vitoria para recalar en un Cádiz que estaba en el segundo nivel. Justo en el año de ascenso, Mario se marcharía al Girona.

Fue adquiriendo mayor experiencia en la categoría de plata, pasando por el Castellón, Real Murcia, Huesca y Hércules C.F. También se atrevió con el fútbol extranjero en Azerbaiyán, con el Khazar Lankaran. Se fue retirando con Eldense, C.D. Roda y Burriana. 

- Tuvimos sus primeros cromos con el Barça y los que llegaron con el Deportivo Alavés. La carrera de este centrocampista fue en declive, aunque también se le pudo ver en colecciones de Segunda División. 

Mario Alberto Rosas Montero nació en Málaga (España), el 22 de mayo de 1980. Su comienzo deportivo tiene lugar por tierras catalanas, con un F.C. Barcelona que le abrió las puertas de La Masía, en la que ingresó con 14 años.

Jugó al lado de futuras estrellas como Xavi Hernández, Carles Puyol y Thiago Motta, empezando en la Segunda B a partir del curso 1997\98, cuando ya iba a contar para la primera plantilla, al cargo de Louis Van Gaal.

Mario entró en alguna que otra convocatoria, hasta que el 15 de mayo de 1998 se produjo su debut en Primera División. En el Nou Camp, el joven centrocampista saldría de inicio para medirse al Valencia C.F. No fue el mejor día para darse a conocer, ya que el Barça perdería por 1-4.

En los siguientes años seguiría en dinámica del filial, aunque participó en más pretemporadas y entró en otras convocatorias. Van Gaal volvería a confiar en el malacitano durante el curso 99\00, en el que iba a tener apariciones en la Copa del Rey y otra en la Liga de Campeones. 

Pero aquellas serían sus últimas citas con el F.C. Barcelona, ya que Mario Rosas acabaría saliendo del club para probar en otros equipos. Ya en la siguiente temporada, el medio andaluz ficharía por el Deportivo Alavés. 

El equipo gasteiztarra se hallaba en un dulce momento, compitiendo por Europa con Mané. En su primer año como "babazorro" Mario jugó 6 encuentros, aunque todos ellos saliendo desde el banquillo. 

- En 2001 estuvo jugando cedido en la U.D. Salamanca, retornando al Alavés para tener una temporada de vació. De esta forma se despidió Mario del máximo nivel, en el que solamente llegó a disputar 7 encuentros.

Ya fuera del club vasco, el mediocampista malagueño ficharía por un Cádiz con el que no llegaría a disfrutar el ascenso a Primera. Tras una breve etapa en el Girona, Mario echaría unos años compitiendo en Segunda. 

En la división de plata jugó para Castellón, Murcia, Salamanca, Huesca y Hércules de Alicante. Entre medias probó por la liga azerí, como miembro del Khazar Lankaran. Tras su salida del Hércules, Mario afrontaría el final de su carrera con C.D. Eldense, Roda y C.D. Burriana.

¿Te acuerdas de Daniël De Ridder?

- El sábado pasado fue a ver con un amigo el Eibar - Albacete, que siempre está bien ver fútbol y en la mejor compañía. Este amigo me trajo unos cromos actuales del Celta, de los que llegaré a escribir cuando se retiren. Pues bien, ahora recuerdo otros regalos que me cayeron, y de ahí sale Daniël De Ridder.

Poco tiempo tuvimos por nuestra Liga a este centrocampista neerlandés. En su día, fue una gran promesa del Ajax que viajó a Vigo para fichar por el R..C. Celta, en el que estuvo un par de temporadas, hasta 2007.

Su carrera continuó por Inglaterra, representando en la Premier a clubes como el Birmingham City y Wigan Athletic. En Israel jugó para el Hapoel Tel Aviv, en Suiza con el Grasshoppers y se retiró en el Cambuur Leeuwarden.

- Daniël Robin Frederick De Ridder nació el 6 de marzo de 1984 en Amsterdam (Países Bajos), aunque su madre es de origen hebreo. Fue internacional con la selección de Holanda, desde las categorías menores hasta llegar a debutar para el combinado absoluto. 

Le llamaban "Ivanhoe", supongo que por el parecido a algún actor que haya interpretado a este personaje novelesco. Sus inicios se perfeccionaron con el Ajax, como una de las firmes promesas que pronto llegarían al nivel superior. 

De Ridder solía actuar como extremo izquierdo, válido para actuar por la otra banda e incluso como mediapunta. En nuestra Liga se vio algo de esa calidad que se intuía, dejando para el Celta unos números de un gol en 20 partidos. Por cierto, yo mismo llegué a presenciar aquel tanto en el estadio Vicente Calderón, frente al Atlético de Madrid.

Volviendo a sus inicios, De Ridder fue creciendo en el club de Amsterdam, hasta verse con la oportunidad de debutar en el ámbito profesional. En enero de 2004 tendría sus primeros minutos en la Eredivisie, en un duelo a domicilio contra el Roda, con victoria por 1-2 para el Ajax.

Intervino en más partidos de aquella campaña en la que su equipo saldría campeón de liga, y aún tendría más apariciones para llamar la atención de otros clubes europeos, entre los que se hallaba el Celta. 

De Ridder aterrizó en Vigo como un fichaje de cartel estelar, para unirse a la plantilla de un Fernando Vázquez que venía de ascender al equipo celeste a la máxima división. Atrás quedaron los tiempos más gloriosos. 

El 25 de septiembre de 2005 vimos los primeros minutos de la perla neerlandesa por Balaídos. Como suplente, De Ridder tendría unos minutillos en el quinto duelo liguero frente al Sevilla. La cita se resolvió con un buen resultado para los gallegos, que vencieron a los andaluces por 2-1.

- Su primera titularidad fue en Copa, ante el modesto Tenisca. Lo que es en Liga, el jugador tendría pocas salidas de inicio, y en una de sus suplencias aprovechó para marcar aquel tanto frente al Atlético en Madrid. 

No triunfó por Vigo, aunque tampoco hubo continuidad para ello. De Ridder dejaría la entidad céltica tras el ejercicio 2006\07, para irse a un Birmingham City donde coincidiría con su compañero Borja Oubiña. 

En la Premier también jugó para el Wigan Athletic, de donde saldría para probar suerte en Israel con el Hapoel de Tel Aviv. Después de jugar para el Grasshoppers en Suiza, De Ridder volvió a su país, donde acabó jugando para Heerenveen, RKC Waalwijk y S.C. Cambuur Leeuwarden.

¿Te acuerdas de Juanito Gutiérrez?

- Cromo más moderno a continuación, aunque yo tuve sus ejemplares más antiguos, cuando dejé de coleccionar. Eso sí, de vez en cuando me da por comprar cromos, como hice hoy para redondear una compra en el supermercado. Sin más dilación, toca pegar en el álbum a Juanito.

Este jugador de perfil defensivo empezó su carrera con el Málaga C.F., para el que jugó bastantes partidos en la alta competición española. Fueron buenos tiempos para el club andaluz, del que salió para fichar por el Alavés. 

Con el equipo vitoriano y la Real Sociedad vivió sendos descensos, y luego se unió al Almería. Entre este equipo y un regreso a Málaga, Juanito terminaría su experiencia en el primer nivel para irse a la liga griega.

- En el Asteras Tripolis terminó su carrera para luego iniciarse en los banquillos, aunque nada importante por el momento en esta faceta. Hoy repasaremos un poco su trayectoria futbolística y lo guardaremos en nuestro álbum virtual. 

Juan Jesús Gutiérrez Robles fue uno de los muchos "Juanitos" que llegaron al máximo nivel. Éste era un defensa central técnico que también era útil como medio defensivo. 

El 17 de febrero de 1980 nació en Málaga (España). En el equipo de su ciudad fue tomando formación, hasta que un buen día consiguió llegar al primer equipo del Málaga C.F. Pronto llegaría a hacer la pretemporada con el mítico Joaquín Peiró.   

Habiendo hecho mucho ya en las categorías menores, Juanito contaría con la gran ocasión de debutar de forma oficial. Su primera aparición fue en Copa del Rey, a domicilio frente al Ciudad de Murcia. El choque finalizaría con empate a uno y el joven defensor no tendría más apariciones en aquel curso 2001\02, así que tuvo que esperar por su estreno en Primera.

Antes de abandonar la entidad de La Rosaleda, Peiró haría debutar al canterano en el máximo nivel. Después de coger ritmo en la Copa Intertoto, Juanito tendría su presentación en Liga. El 1 de septiembre de 2002, contaría con minutos en una victoria a domicilio por 2-3, ante el Recreativo. 

Aunque no pudo hacerse con la titularidad, en aquel curso se le vería en otros 3 encuentros ligueros y en otro de la Copa de la UEFA. Las grandes oportunidades llegarían con Juande Ramos de entrenador.

Juanito ya sería indiscutible en la campaña 2004\05, con un Málaga europeo que dejaría para fichar por el Deportivo Alavés, que por entonces ya disfrutaba de un buen momento deportivo. Sin embargo, todo se iba a torcer.

- El equipo "babazorro" descendería a Segunda, lo mismo que iba a ocurrir con una Real Sociedad para la que compitió en la campaña 2006\07. Después de aquello, Juanito se incorporaría a la U.D. Almería.

Siguió cumpliendo con apariciones en la división de oro española, pasando dos temporadas en la escuadra indálica, que abandonaría para regresar al Málaga C.F., donde estuvo temporada y media más.

Retornó al Almería para disfrutar de su último año por Primera División, redondeando unas cifras de 218 partidos y 4 tantos. Los pasos finales de su carrera futbolística se darían por el fútbol heleno, donde Juanito jugó para el Asteras Tripolis. El defensa malacitano se retiraría en 2011.

¿Te acuerdas de Miodrag Belodedici?

- Este defensa fue una de mis debilidades de los años noventa, un tipo con grandes condiciones físicas y la perfecta colocación en su zona. Por Moldova Nouă se dieron sus inicios, llegando al Steaua en 1982. 

Empezaría a evolucionar con el equipo de Bucarest y se haría muy famoso con su fichaje por el Estrella Roja, con el que Miodrag Belodedici fue campeón de Europa en 1991. Poco después, el defensor se uniría al Valencia C.F.  

Dos años estuvo en la disciplina mediterránea, saliendo después a un Valladolid con el que también compitió en Primera División. En Segunda representó al Villarreal C.F., donde estuvo un año. Lo intentó en México con el Atlante y retornó al Steaua para retirarse con 35 años.

- Ahora viene donde la matan, pues toca explicar que este central apareciese en los cromos como "Belodedic". Miodrag Belodedici es su nombre de nacimiento (Миодраг Белодедић en cirílico serbio). Nació el 20 de mayo de 1964 en Socol, un pueblecito rumano fronterizo con Serbia, país del que es su familia.

Decidió jugar para Rumanía desde la categoría Sub-21, de modo que muchos le recordamos al lado de grandes cracks internacionales como Gica Hagi, Florin Raduciou o Ilie Dumitrescu. 

Con el Minerul Moldova Nouă empezó su formación, para luego jugar en el Luceafărul antes de fichar por el Steaua, de la misma capital rumana. Así es como llega a profesional. 

Después de seis temporadas destacando en el Steaua, Belodedici llega al Estrella Roja, donde se mezclaría con futbolistas de la talla de Robert Prosinecki, Dejan Savicevic y Darko Pancev, entre otros. 

Solo los más carrozas disfrutamos de lo que hizo aquel equipo con Ljupko Petrovic. En la campaña 90\91, el Estrella Roja se proclamaría campeón de la Champions League. Para Belodedici no fue una novedad, ya que en 1986 lo había vivido con el Steaua de Emerich Jenei.

En la entidad belgradense estuvo tres años, abandonando la misma para probar en una potente liga como la española, en la que iba a representar a un Valencia que aspiraba a mucho con Guus Hiddink de entrenador. 

Su estreno en nuestra competición llega el 5 de septiembre de 1992, en una cita en casa frente al Rayo Vallecano. Los de Hiddink vencerían por 1-0, siendo Belodedici uno de los jugadores más destacados. Su mayor participación llegó en la próxima campaña, la última como jugador che.

- En 1994 ficha por el Real Valladolid, con el que se despidió de la categoría máxima redondeando 80 apariciones. El defensa rumano continuaría por España, pero compitiendo en Segunda con el Villarreal C.F.

Estuvo una temporada en El Madrigal, lo justo para dejar un par de tantos, los únicos que registró por nuestro país. En 1996 se marcha del club castellonense para probar por la liga mejicana, como miembro del Atlante. 

Dos años estuvo en la entidad azulgrana, para luego retornar a Rumanía y a ese Steaua en el que se le vio triunfar desde muy joven. Dos Copas de Europa figurarían en el palmarés de Belodedici, un magnífico zaguero al que coleccionamos con dos camisetas diferentes en la campaña 94\95.

¿Te acuerdas de Álex Fernández Sama?

- La suerte de conocer la alta competición fue llegar al Sporting de Gijón, aunque antes tuvo que jugar cedido en el Marino de Luanco. A mediados de los noventa, Álex ya estaba preparado para jugar en Primera.

Tuvo su momento para instalarse en la titularidad del equipo gijonés, pero acabó saliendo de su Asturias natal en busca de más oportunidades, así que fichó por el Deportivo Alavés. En Vitoria no le fue nada bien.

Terminó su experiencia en la división de oro y continuó con su extensa carrera jugando para varios equipos modestos. Álex pasó por Ourense, Granada y C.D. Logroñés, donde estuvo tres años. Aguantó jugando hasta 2010, representando a clubes como el Linares y U.D. Melilla.

- Quizás no debió abandonar el Sporting, pero tampoco le quedó otra. Pude tener sus adhesivos, tanto en el equipo asturiano como en su breve paso por el Alavés, con el que finalizó su aventura por el máximo nivel con 35 partidos y 2 goles. Aquí vemos algunos de sus cromos. 

Alejandro Fernández Sama fue conocido deportivamente como "Álex". Nació en Gijón (España), el 24 de mayo de 1974. Debió forjar sus inicios en el Club Deportivo La Braña. 

Centrocampista goleador, fichó por el Sporting de Gijón para formar parte del filial, aunque de inmediato se iría cedido al Marino de Luanco, para el que compitió en Tercera. 

Álex volvería al club gijonés para salirse con el filial, lo que haría que Díaz Novoa quisiese probarle con los mayores. Con el campeonato 95\96 ya casi terminado, el mediocampista podría debutar en Primera. El 4 de mayo de 1996 tendría unos minutos en el estadio Luis Casanova, en un duelo que terminaría con derrota ante el Valencia C.F., por 1-0.

Tendría más apariciones en la siguiente campaña, justo cuando lució sus mejores virtudes con el segundo equipo, para el que marcó 17 goles en Segunda B. Ya con Miguel Montes de entrenador, Álex se quedaría en la primera plantilla para afrontar la temporada 97\98. 

Contó bastante para el entrenador, interviniendo en muchos encuentros entre la Copa y la competición liguera. De hecho, en ese hizo sus mejores números y dejó su último tanto en Primera frente al Deportivo de La Coruña.

Lástima que sería un mal año en lo colectivo, ya que el Sporting de Gijón no conseguiría la permanencia pese a los cambios de entrenador. Por su parte, Álex cambiaría de aires para seguir en el nivel superior.

- El medio asturiano ficharía por el Deportivo Alavés, donde empezó jugando a las órdenes de Mané. La competencia era muy alta, y eso le dejó muy pocas opciones para poder vestir la zamarra alavesista. 

Menos suerte tendría en la campaña del cambio de milenio, en la que jugó su partido de despedida en el primer nivel para fichar en el mercado de invierno por el C.D. Ourense, que se hallaba en Segunda División B.

Durante varios años competiría por la categoría de bronce, abandonando el club de As Burgas para pasar por el Granada, Gramenet y un Logroñés en el que estuvo tres temporadas a buen nivel. Posteriormente se uniría al C.D. Linares y terminó su actividad en la U.D. Melilla.

¿Te acuerdas de Enrique Irazoki?

- Aunque no fueron muchos partidos, este defensa guipuzcoano llegó a competir en la más alta división. Lo hizo con la Real Sociedad, después de una completa formación y haber destacado en las filas del Sanse.

Debutó en el año que se ganó la Copa del Rey, el último título de aquella gloriosa etapa de los ochenta que derivaría en años más irregulares. Ante la falta de oportunidades, Irazoki acabaría abandonando el club de su ciudad. 

Tampoco se fue muy lejos, pero lo de competir en Primera ya no sería para él. Jugaría en el vecino Eibar antes de desvincularse de la entidad donostiarra. Su experiencia más lejana fue con el Racing de Ferrol, previo paso por el Real Unión de Irún. Irazoki se retiró joven, con el Barakaldo C.F.

- Aún me duelen los ojos cada vez que leo "Irazoqui" en aquellos cromos de la temporada 91\92. Son cosas que ocurrían mucho en aquellos años, pero ya nos chocaba bastante. Si no me equivoco, el que vemos en estas líneas fue el único adhesivo de Enrique Irazoki Otxoteko.

Su hermano Joseba también jugó al fútbol, aunque no llegó tan lejos como Enrique. Es el menor de los hermanos, y nació el 25 de enero de 1969 en Oiartzun, Gipuzkoa (España). A mediados de los ochenta ya jugaba para el filial, poco antes de ser llamado para formar filas en el primer equipo. 

Con John Benjamin Toshack, Irazoki tendría la ocasión de debutar en Primera, con el campeonato casi acabado. El 6 de junio de 1987, el defensor sería titular en La Condomina, donde se perdió con el Murcia por 4-0.

Tuvo otra aparición en aquel curso 86\87, con otra goleada en el Vicente Calderón ante el Atlético (5-1). También es cierto que el conjunto "txuriurdin" estaba más concentrado en la Copa del Rey, ya que aún faltaba superar esa final, y precisamente contra el equipo de Manzanares. Al final, el equipo de San Sebastián se proclamaría campeón en la tanda de penaltis. 

Irazoki siguió jugando para el Sanse a la espera de más oportunidades con el conjunto profesional, y más minutos tendría antes de la marcha de Toshack, interviniendo en partidos frente a Valencia y Real Valladolid.

El zaguero de Oiartzun nunca tuvo fácil quedarse en la primera plantilla, apurando sus últimas actuaciones por la Segunda B mientras continuó entrando en las convocatorias de la primera plantilla.

Con Boronat tendría las últimas oportunidades, y siendo titular contra equipos como el Castellón, Mallorca, Barça y Rayo Vallecano. Aquellas fueron sus últimas citas por la categoría máxima española.

Finalizó su experiencia en Primera con 8 apariciones. Entró en convocatorias del equipo durante el curso 90\91, pero Irazoki no volvería a jugar entre los grandes, teniendo que estudiar otras ofertas para seguir en activo.

- Recuerdo su paso por la S.D. Eibar, con el que completaría aquel ejercicio 90\91 disputando bastantes encuentros en Segunda División. Para el verano de 1991, haría la pretemporada con la Real Sociedad.

Tuvimos ese cromo de la campaña 91\92, pero ahí quedaría la cosa. Irazoki sería descartado por Toshack y tuvo que ir explorando otras propuestas para seguir en activo, y no fueron de equipos del primer nivel. 

Finalizó su etapa "txuriurdin" jugando por última vez para el filial y se fue al Real Unión de Irún, para jugar en una Segunda B en la que iría completando una carrera que se acortaría de forma prematura.

Tras ese paso por el club fronterizo, Irazoki haría su primer viaje largo para completar su vida deportiva, jugando durante un año para el Racing de Ferrol, hasta 1995. De vuelta por Euskal Herria, el zaguero de Oiartzun terminaría su actividad jugando para el Barakaldo C.F.

¿Te acuerdas de Balta Sánchez?

- Seguramente, muchos aficionados de las más recientes generaciones conozcan mejor la carrera de Balta como entrenador, pero éste también llegó a posar para los cromos en su trayectoria como futbolista. 

Es el típico jugador de club, ya que este salmantino solamente representó a la U.D. Salamanca a lo largo de su vida deportiva, aunque nunca pudo debutar en Primera División. Parece que esa suerte le esquivó. 

Tuvo sus mejores opciones compitiendo en Segunda y Segunda B, pasando doce temporadas en un Salamanca con el que terminó su carrera celebrando un ascenso al máximo nivel. Años después, Balta aparecería como entrenador del equipo, e incluso debutaría en Primera en su nueva labor.

Por desgracia, tuvo que hacerse cargo del conjunto "charro" en plena crisis deportiva y económica, siendo testigo directo de una triste desaparición en 2013. También entrenó a equipos como el Zamora C.F. y Palencia C.F.

Hablemos también de sus cromos. Baltasar Sánchez Martín fue conocido en las colecciones como "Balta", y así le mencionarían sobre el terreno de juego. Tuvo su primer adhesivo en Super Rollan (1983\84), y reapareció en nuestros álbumes con el ascenso del Salamanca, en una tirada de Segunda División y una obra de Panini en la temporada 1995\96. 

Balta nació en Salamanca (España), el 9 de mayo de 1962. Supongo que jugaría en equipos escolares y en clubes locales antes de llegar a la U.D. Salamanca, ese club que le marcaría toda su carrera en el grado profesional. 

El club salmantino se hallaba en Primera cuando Balta ya era una promesa del cuadro filial, un jugador de zaga que empezaría a entrenar con los mayores, que por entonces estaban en manos de Manolo Villanova.

Aunque no tuvo la opción de debutar en la alta división o en Copa del Rey, el defensor sí contaría con la suerte de debutar profesionalmente, en la Copa de la Liga. El 13 de mayo de 1984, Balta completaría un partido en casa contra el Real Mallorca, y el duelo finalizó con empate a unos.

Aquella campaña no acabaría bien, puesto que el Salamanca descendería a Segunda y mucho tardaría en dejarse ver por la alta competición. A partir de entonces, el canterano iría contando con más posibilidades.

En otra temporada decepcionante, poca culpa tendría el zaguero del descenso a la Segunda B, ya que pocas veces se le pudo ver sobre el terreno de juego. Ya con el equipo "charro" en la categoría de bronce, Balta empezaría a ser más importante, cumpliendo con muchas titularidades hasta el ejercicio 87\88, que fue cuando se consiguió volver al segundo nivel.

- Ya más experimentado, el jugador ejercería como uno de los capitanes del vestuario. Se soñaba con volver a Primera, pero el Salamanca volvería al tercer nivel a principios de los noventa.

Durante el tramo final de su trayectoria deportiva, esta leyenda unionista continuó siendo importante, aunque las lesiones empezarían a hacer mella y poco se le pudo ver en el año del regreso a Segunda (1994).

Se avecinaban buenos tiempos, pero el veterano defensor salmantino cumpliría con sus últimas actuaciones sobre el verde. Ayudó al club de su ciudad en su intentona por retornar al máximo nivel, el sueño imposible de Balta, que nunca llegaría a competir en el mismo. 

Finalizaría su carrera jugando únicamente para el club de El Helmántico, para el que intervino en un total de 317 partidos, en los que hizo 26 goles. Poco después, Balta iniciaría su nueva etapa como entrenador.

¿Te acuerdas de Ademir Vieira?

- Aunque no me alcanza la memoria para saber que fue un magnífico jugador del R.C. Celta de Vigo, sí pude tener un cromo suyo que un día me regalaron por mi afición al club vigués, al que Ademir Vieira llegó a representar en la Primera División española y otras categorías más bajas. 

Los más míticos le recordarán como un futbolista que honró al Celta hasta por la categoría de bronce. No fue un Pelé o un Ronaldo, pero Ademir consiguió ser un ídolo en sus años que pasó compitiendo por Balaídos.

Este centrocampista tuvo sus inicios con equipos como el Santo André u Olhanense, e incluso lo intentó por el fútbol norteamericano con Toronto Metros. En Portugal jugó también para Oporto, Imortal y Louletano.

- Por el Celta pasaron muchos futbolistas brasileños, con sus cromos y otros recortes que nos pueden trasladar a una época muy lejana, ya que este jugador empezó por España a finales de los setenta. 

Ademir Vieira nació en São Paulo (Brasil), el 21 de octubre de 1951. Con Esporte Clube Santo André labró sus inicios y pronto se atrevió a cruzar el charco, para llegar a Portugal y así fichar por el S.C. Olhanense.

Como las grandes estrellas, Ademir probaría en Norteamérica, con el Toronto Metros canadiense. Pronto regresaría al país vecino para unirse a uno de los grandes de la Primeira Liga, el F.C. Oporto. A este club se unió en 1975.

Jugó unos cuantos partidos para el equipo do Dragão, así que varios clubes españoles ya tenían apuntado su nombre en la agenda. En 1978, el centrocampista brasileño llegaría a Vigo para fichar por el R.C. Celta, que entonces se hallaba en Primera con Laureano Ruiz de entrenador. 

Ademir no tendría muchas apariciones en su primera campaña de celeste, debutando como tal, en un partido de la Copa del Rey frente al Alondras. El medio paulista anotaría en aquella amplia victoria por 0-4.

Unos días después, el 15 de octubre de 1978, el jugador debutaría en Liga. Fue en El Sardinero, contra un Racing que se impondría por 2-0. No se le pudo ver mucho más en acción durante aquel primer año como céltico, en el que también se estrenó como goleador liguero frente al Real Madrid.

Mal acabó aquella campaña, con un Celta que descendió a Segunda División. Peor sería al año siguiente, cuando Balaídos tuvo que lamentar la bajada a Segunda B. Por suerte, Milorad Pavic ficharía por el club olívico. 

- El técnico balcánico supo exprimir toda la calidad del mediocentro brasileño, que en aquel ejercicio haría 7 tantos para colaborar en el retorno a la categoría de plata. Ademir ya se había ganado al celtismo.

El milagro que obró Pavic fue increíble, ya que conseguiría meter de nuevo al Celta en la alta competición en 1982. Por desgracia, al gran Ademir no le quedaba mucho tiempo en la entidad celeste. 

Jugó un último partido para despedirse de la Liga Española, en la que el brasileño hizo unos pobres números de 5 partidos y un gol. Sus mejores registros fueron en las divisiones menores. Después volvería al Olhanense y ya se retiraría en Portugal, donde jugó también para Louletano e Imortal.

¿Te acuerdas de José Antonio Castillo?

- El siguiente cromo a pegar en el álbum es el de José Antonio Castillo, otro jugador con poco recorrido por la alta competición española, un mediocampista granadino que inició una vida deportiva en el C.D. Málaga. 

En Segunda División ya empezó a demostrar un nivel prematuro, antes de fichar por un Valladolid con el que lograría ascender a Primera División. Así es como pudimos ver a Castillo compitiendo entre los grandes.

Tampoco le duró mucho la gloria, ya que el medio andaluz tendría aquella temporada en Primera y nada más. Como nuestro anterior protagonista, acabaría probando suerte en Portugal con G.D. Chaves y volvería a España para tener una pronta jubilación, con equipos como Atlético Marbella y Motril.

- No sé si siguió de alguna manera jugando al fútbol, o quizás dejó el deporte por culpa de alguna lesión. El caso es que no tuvimos muchos cromos de este jugador, los que se muestran en esta página y alguno más. 

José Antonio Castillo Barragán nació en Granada (España), el 17 de febrero de 1970. Supongo que se inició con algún equipo amateur de su ciudad antes de recalar en las filas del C.D. Málaga, donde pudo darse a conocer. 

A principios de los noventa, este centrocampista conseguiría entrar en los planes de Waldo Ramos, quien no iba a terminar la temporada 1990\91 por La Rosaleda. 

Su debut vino en un enfrentamiento en El Helmántico contra la U.D. Salamanca, en la segunda fecha del campeonato. El centro granadino completaría todo el encuentro contra el cuadro "charro", ante el que se consiguió sacar un punto a domicilio (1-1). 

En los siguientes compromisos iba a seguir teniendo minutos, y bastantes apariciones como titular. El jugador tuvo continuidad al año siguiente, cuando el Málaga se vio descendido a la Segunda División B.

De cara al curso 92\93, Castillo iba a fichar por el Real Valladolid de Marco Antonio Boronat. El mediocampista granadino ayudaría al equipo pucelano con 2 goles para celebrar el ascenso a la categoría máxima. 

Castillo aparecería al fin en las colecciones de la élite del fútbol español, debutando en el primer nivel un 5 de septiembre de 1993. Con minutos desde el banquillo, el andaluz poco pudo aportar para evitar una derrota en el estadio de Zorrilla frente al Sporting de Gijón (0-1). 

- La siguiente cita sería en Copa, en un duelo en tierras levantinas con empate sin goles. Castillo empezaría a ganarse la titularidad, y hasta dejaría muy buenas actuaciones en su última etapa por Pucela.

El equipo vallisoletano conseguiría la permanencia, pero el mediocampista no seguiría por Zorrilla y concluiría su concurso en la Primera División con 25 apariciones. A partir de entonces, no le coleccionaríamos más.

Aprovechó una oferta del Grupo Desportivo de Chaves para competir un año en la Primeira Liga portuguesa, retornando al país para fichar por un Almería que estaba en Segunda División. Pronto terminó la carrera, después de haber servido a Atlético Marbella y Motril C.F.

¿Te acuerdas de José Luis Gallardo?

- Este defensor tuvo sus oportunidades para jugar en la alta competición con el R.C.D. Espanyol, equipo en el que se formó hasta la llegada de los años noventa. Ya en 1992, José Luis Gallardo se fue cedido al Lleida.

Con el equipo ilerdense celebró un sonado ascenso a Primera División, como también haría en su vuelta al Espanyol. Mala suerte que no volvería a competir entre los grandes, así que tuvo que fichar por el C.D. Badajoz.

Tuvo su aventura en el extranjero, jugando para el Campomaiorense en Portugal. Aún pasaría por unos cuantos clubes antes de retirarse, jugando en Segunda para Toledo y Recreativo de Huelva. Otros equipos en los que estuvo fueron: Xerez, Vecindario, Real Unión, Palamós y Guíxols. 

- Algunos cromos pudimos coleccionar con este defensa central. Justo encima de este párrafo, tenemos la vista trasera del adhesivo de Ediciones Este 94\95, con su parte anterior reflejada más abajo. También vimos ejemplares de Panini cuando estuvo con la U.E. Lleida.

José Luis Gallardo Montes nació en Barcelona (España), el 12 de septiembre de 1971. En un afiliado del Espanyol, el zaguero comenzaría a competir en la Segunda División B durante la campaña 1989\90.

Con el Hospitalet empezó a destacar desde el principio, pasando dos temporadas más hasta conseguir entrar en las primeras concentraciones de Jaime Sabaté. Entonces, Gallardo era una reputada promesa que jugaba para la selección española Sub-20. 

El 24 de noviembre de 1991, Gallardo sería titular por sorpresa en El Molinón, donde el equipo barcelonés se mediría al Sporting de Gijón. La escuadra asturiana se llevaría los dos puntos (3-0). 

Gallardo tendría otras apariciones con el primer equipo en aquella campaña 91\92, y una de ellas sería en la Copa del Rey, frente al Sevilla. En su siguiente aparición liguera, el defensa barcelonés sería expulsado por Barrenetxea Montero, en Las Gaunas contra el Logroñés. Tuvo otras apariciones siendo titular ante equipos como el Deportivo y Albacete. 

De cara al curso 92\93, Gallardo tendría que jugar cedido para el Lleida, que estaba en Segunda División. Fue una gran labor la que hicieron los de Mané el técnico que llevó al cuadro catalán a Primera División. 

Volvería al Espanyol pese a que ya contaba con su cromo en el equipo ilerdense. El club "perico" solicitó la incorporación de su defensor para afrontar una difícil temporada, ya que se había descendido al segundo nivel. 

Pocas apariciones tendría con José Antonio Camacho, el entrenador con el que se recuperaría la categoría en 1994. Una vez más, José Luis Gallardo saldría en los álbumes de los noventa.

- El jugador se vería sin posibilidades en aquel ejercicio 94\95, sin llegar a intervenir en partidos oficiales. Así es como Gallardo acabó desvinculándose del R.C.D. Espanyol, habiendo jugado en Primera División 4 partidos, mas lo que hizo en Segunda y otras competiciones. 

Durante las dos próximas campañas, el defensa catalán jugaría en la categoría de plata con el C.D. Badajoz. Su rendimiento gustó bastante por el país vecino, de ahí que fichase por el S.C. Campomaiorense.

Pocos minutos tuvo en la Primeira Liga, de modo que tendría que abandonar Campo Maior para fichar por el Toledo, donde tampoco tuvo muchas posibilidades, en parte, por culpa de las lesiones.

El resto de su carrera fue con equipos más modestos, jugando en Segunda con el Recreativo y quemando etapas con Xerez, Vecindario, Real Unión de Irún, Caravaca, Palamós y A.D. Guíxols, donde se retiró.

¿Te acuerdas de Román Miranda?

- De los tantos futbolistas que llegaron a vestir los colores de C.D. Tenerife y la U.D. Las Palmas. En el club tinerfeño empezó su trayectoria, jugando varios partidos en Segunda División, hasta que se descendió.

Román aguantó un par de temporadas más en el club isleño, hasta que su nivel se vio harto sobrado para la categoría de bronce. Entonces, el Atlético de Madrid se hizo con sus servicios, y así llegó a debutar en Primera.

Este centrocampista tuvo que abandonar Madrid por la falta de minutos, para después recalar en Las Palmas, con el que pudo cumplir sus últimos partidos por la máxima competición española. A mediados de los ochenta debió retirarse con el club amarillo, no sé si por alguna lesión. 

- Y es que este se retiró con 28 años de edad. Se suele decir que es la mejor edad para un futbolista, cuando mejor puede explotar sus virtudes. Entonces, Román Miranda Rodríguez ya diría adiós al deporte. 

Jugaba como centrocampista y nació el 9 de agosto de 1956 en Tacoronte en Santa Cruz de Tenerife (España). En la ciudad de Tenerife, Román empezaría jugando para un equipo de barrio como la U.D. Salud. 

De este club pasaría al C.D. Tenerife, ya para ir preparando su profesionalidad, que no tardaría mucho en llegar. En la temporada 1975\76, el técnico Felipe Mesones requiere su presencia en la primera plantilla del equipo "chicharrero", pues ya lo vio listo para debutar.

Román debutaría en la Copa de España, el 12 de octubre de 1975. El "Tete" se trasladó a tierras vascas para medirse al Lagun Onak. El debutante tendría escasos minutos frente al conjunto de Azpeitia, que sorprendería al cuadro isleño al vencer por 1-0 en su domicilio. 

Días después llegaría su estreno en Segunda, jugando cinco minutos para colaborar en un empate en Zorrilla y contra el Valladolid (1-1). En aquella campaña, el medio de Tacoronte jugaría otros partidos más.

El equipo tinerfeño acabaría descendiendo a Segunda B en la campaña 77\78, y Román aguantaría un par de años más, siendo un futbolista determinante que pronto contaría con buenas ofertas para crecer en su carrera.

La mejor propuesta fue la del Atlético de Madrid, que se haría con los servicios del medio canario de cara al curso 1980\81, en el que el jugador iba a poder dar sus primeros pasos por la alta división española. 

Con García Traid, Román tendría sus primeros duelos en Copa, hasta que en diciembre de 1980 pudo debutar en Primera. Fue en El Sadar, contra un Osasuna bregador que no cedería los dos puntos (0-0).

En su primera temporada como rojiblanco, el futbolista canario tuvo 5 apariciones y aprovechó para hacer su primer tanto para el Atleti, en su debut en Copa contra el Calvo Sotelo. Lo que es en la competición liguera, el centrocampista no pudo estrenarse como goleador.

- Creo que no hubo cromo de Román como atlético... o a mi no me consta. El jugador tinerfeño pasó dos temporadas en el club madrileño, pero pocas opciones tuvo para demostrar algo en sus primeros duelos por la alta categoría, en la que iba a seguir compitiendo con la U.D. Las Palmas.

Entonces sí, los chavales pudieron coleccionar a este jugador con su zamarra amarilla. Con el austriaco Walter Skocik, el mediocampista debutaría como jugador "pío-pío", en un duelo frente a la Real Sociedad en San Sebastián, que terminó con empate a uno. 

Román ayudó en todo lo posible al equipo de Gran Canaria, que en aquella campaña 82\83 pasó ciertos apuros. De hecho, al término del ejercicio se descendería a Segunda División, Con Celta y Racing de Santander.

Su experiencia en el primer nivel terminó con 29 apariciones, la mayoría con la U.D. Las Palmas. En el equipo "canarión" seguiría por dos años más, retirándose cuando se logró retornar a la división superior en 1985.

¿Te acuerdas de Damiano Longhi?

- Poco tiempo tuvimos a este extremo italiano por nuestra Liga, como miembro de un Hércules que luchaba por quedarse en la categoría máxima, cosa que no se antojó nada fácil en aquella campaña 96\97.

Longhi fue un jugador que solamente salió de su país para representar al Hércules C.F. en España. Tampoco fue muy amplia su experiencia en la Serie A italiana, en la que jugó para Padova y Reggiana.  

Al equipo de Véneto llegó procedente del Modena F.C., con el que se inició. Jugó cedido para el Pescara y llegó a la Liga Española, de donde se fue con más pena que gloria para volver a su país, para completar su carrera con clubes humildes Castel di Sangro, Treviso y Unione Sportiva Fiorenzuola.

- Pero Damiano Longhi tuvo tiempo para lucir un poco de talento por el fútbol español, así como de lucirse con su sonrisa en nuestras colecciones, como claramente se refleja en la segunda diapositiva, un cromo de la temporada 96\97.  

Tampoco acabó aquel curso con el equipo herculano, ya que se fue a la Reggiana habiendo jugado en nuestras competiciones 13 partidos de Liga y otros dos de Copa. 

Extremo diestro, nació el 27 de septiembre de 1966 en Faenza, Ravenna (Italia). Con el Modena F.C. disfrutó de su preparación para llegar a profesional a principios de los ochenta, que fue cuando debutó en la segunda división italiana. 

Longhi tuvo mejores posibilidades con su fichaje por el Calcio Padova. Después de haber demostrado un grandísimo nivel con el equipo de Modena, el extremo atacante llegó a la entidad de Euganeo para alcanzar el nivel más alto de las competiciones italianas. 

Acabó jugando su mayor número de partidos en la Serie A, dejando los mejores registros en la campaña 94\95, con 5 goles en 31 apariciones. Siguió un año más por Padova, hasta que el equipo descendió a la Serie B.

En aquellos años noventa también jugó para Delfino Pescara, finalizando su contrato con el Padova para salir por vez primera del país de la bota. De cara a la temporada 96\97, Longhi ficharía por el Hércules C.F.

Aquel curso empezaría con Ivan Brzic en el banquillo del José Rico Pérez. El técnico serbio le haría debutar en nuestra competición, el 1 de septiembre de 1996. Aquella tarde, el cuadro alicantino se impondría al Extremadura para dejar su primera victoria en Liga (2-1).

- Al atacante italiano se le vieron buenas maneras, pero los números no le acompañaron mientras fue miembro del equipo herculano, con el que iría jugando cada vez menos en una campaña con final de descenso.

Pero Longhi no llegaría a sufrir ese cruel desenlace, ya que en el mercado invernal sería declarado transferible y acabaría marchándose de Alicante. De vuelta por Italia, su siguiente destino fue la Reggiana. 

El punta de Faenza jugaría sus últimos partidos por el alto nivel de la competición italiana, ya que en los siguientes años se vería compitiendo por ligas menores. Damiano Longhi jugó para Castel di Sangro, pasó por el Treviso y terminó su carrera deportiva con la Unione Sportiva Fiorenzuola.

¿Te acuerdas de Jesús Moure?

- Justo al final de su carrera pudo debutar en Primera, después de muchos años trabajando duro en competiciones más bajas y dividiendo su carrera entre dos clubes muy históricos del fútbol gallego.

Jesús Moure empezó en este deporte con la S.D. Compostela, pasando de competir en Tercera a hacerlo en Segunda B, como haría después con el Pontevedra C.F. Tres años estuvo jugando para el equipo granate.

Volvería a Santiago de Compostela para disfrutar de los mejores años de su trayectoria deportiva. En cuestión de poco tiempo, este delantero ayudó con sus goles a que el equipo albiceleste pasase de competir en la categoría de bronce a verse en Primera División. En 1995 se retiró. 

- En su día fue una de las grandes promesas del balompié gallego. Asistí a unos cuantos entrenamientos suyos cuando jugó para el Pontevedra y, por sorpresa, un día abro el sobre de cromos y me lo encuentro en las colecciones de la campaña 1994\95.

Jesús Moure Vieiro jugaba como delantero y tenía un don para encontrarse con el gol. Este futbolista nació el 26 de agosto de 1961 en Santiago de Compostela (España).

Ingresó muy joven en la cantera de la S.D. Compostela y empezó a destacar en su etapa como juvenil, y así fue como pudo tener sus primeras apariciones, cuando el equipo se hallaba en Tercera División.  

Con la llegada de los ochenta, Moure se acostumbraría a las citas con el primer equipo, entonces gestionado por José López. En la novedosa Segunda B, el atacante gallego empezaría a dejar sus primeros goles en el ejercicio 1981\82, aunque no se ganó la titularidad hasta mediados de los ochenta. 

Pasó unos cuantos años en la entidad de San Lázaro, ya confirmado como uno de los mejores delanteros de la categoría, hasta que el "Compos" descendió. Fue entonces cuando el jugador fichó por el Pontevedra C.F. 

Moure tendría su primer contacto con Castro Santos, técnico que años después se lo llevaría al club santiagués. El "Nécora" confiaría en la puntería del delantero y le concedería la titularidad. 

El jugador respondió con unos cuantos goles, pero no pudo estar a la altura de lo que había hecho con el Compostela. Por ello, la directiva del club albiceleste optó por recuperar a su delantero, que tras tres temporadas por Pasarón regresaría a casa para vivir su mejor momento.

- A base de goles, Moure ayudó a que el Compostela subiese a Segunda División. Durante tres temporadas se compitió en Segunda, y en el curso 93\94 firmó 11 tantos para celebrar el ascenso a Primera.

Apareció en sus primeros cromos y debutó en el nivel más alto del fútbol español. El 11 de septiembre de 1994, Moure jugaría en el Carlos Tartiere, donde el cuadro gallego empataría a dos frente al Real Oviedo.

En sus 18 apariciones por el máximo nivel, Jesús Moure se atrevió a dejar un par de goles, los que convirtió ante equipos como el Logroñés y Sporting de Gijón. Fue su única temporada en Primera División, ya que al término de la misma, el delantero decidiría colgar las botas.